El fin de semana pasado estuvimos celebrando la Primera Comunión de Valeria y lo pasamos realmente bien. Os cuento ésto, porque os voy a enseñar las galletas decoradas con fondant que le regalé.
Como sabéis todos mis regalos o encargos me gusta personalizarlos y adaptarlos a la persona en cuestión, tanto en el diseño, como el sabor. Mis galletas favoritas son las de sabor vainilla, (si queréis la receta de las galletas, pinchad aquí) son muy suaves, y gustan a todos, por eso las elegí en esta ocasión, porque sabía que iban a ser un acierto seguro.
No podían faltar las galletas con la inicial de su nombre, me gustan mucho, creo que le dan un toque muy elegante al conjunto.
Un clásico que me encanta son las palomas de la paz, tan bonitas que no podía dejar de incluirlas. Con un detalle en contraste en rosa pálido.
¡Y cómo no, las muñequitas! ¡Esas tampoco podían faltar!
La verdad es que son una monada. ¡Aquí están listas para entregar!
A la niña le gustaron mucho las galletas.
Os puedo decir de la celebración, que los niños lo pasaron genial, jugando y disfrutando de los primos. Hubo magia, regalos y muchas sorpresas Los adultos, lo pasamos en grande, conversando y riendo. El sitio era precioso y el tiempo que nos hizo fue estupendo para aprovechar y dejar plasmados en las fotos, tan buenos momentos al aire libre. Aunque lo mejor de todo fue la compañía. Juntarnos toda la familia, padres, abuelas, hermanos, tíos, sobrinos y primos, no tiene precio.
De alguna manera Valeria tuvo la culpa de que estuviéramos todos allí, para compartir con ella ese día tan especial.
¡Enhorabuena a los papás!. Y gracias por hacernos partícipes de tan hermoso día. Muchos besos.
Saludos
María José
¡Y no os olvidéis de poner un dulce en vuestra vida!