Son ideales para desayunar, merendar o para regalar como en mí caso.
Con pocos ingredientes, tendréis unas galletas riquísimas, crujiente por fuera y blanditas por dentro, con el centro relleno de una dulce mermelada.
Espero que os animéis a hacerlas, si queréis saber como se preparan, no os perdáis está receta!
Os encantará!
(Con estás cantidades salen 46 galletas)
Ingredientes:
500 grs. de harina de trigo.
200 grs. de azúcar glas (impalpable o flor).
250 grs. de mantequilla sin sal a temperatura ambiente.
1 huevo L.
1 Cdta. de pasta o extracto de vainilla.
Una pizca de sal.
Mermelada de distintos sabores.
Preparación:
Batimos la mantequilla junto con el azúcar glas y la pizca de sal a velocidad media alta, 5 minutos.
Añadimos el huevo junto con la vainilla y batimos hasta integrarlos.
Tamizamos la harina y añadimos a la mezcla, mezclamos a la velocidad más baja que tenga la batidora hasta integrarla (tiene que quedar una masa manejable, con la que se pueda hacer bolas y no se pegue a las manos).
Hacemos una bola con la masa, la envolvemos en papel transparente (film) y metemos en la nevera media hora.
Pasado el tiempo, sacamos la masa de la nevera y hacemos bolas de 22 gramos, las aplastamos un poco y las colocamos en una bandeja de horno forrada con papel de hornear, separadas entre ellas unos centímetros, con el mango de una cuchara de madera o cualquier utensilio con el mango redondo, presionamos justo en el centro de las galletas para hacer un hueco, rellenamos los huecos con mermelada de distintos sabores.
Metemos en el horno precalentado a 180° grados, 12 minutos.
Sabremos que están hechas cuando empiecen a coger un ligero color dorado.
Sacamos del horno y dejamos reposar la bandeja 5 minutos sobre una rejilla.
Luego pasamos las galletas a la rejilla y dejamos enfriar por completo.
Y ya las tendremos listas para disfrutarlas.
Mis galletas son para regalarlas, así que las he decorado con glasa real, les he hecho una flor a cada una, las he espolvoreado con oro comestibles y las he metido en una bolsita de celofán.
Fuente: este post proviene de Ana Recetas Dulces, donde puedes consultar el contenido original.
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