¿Qué tal va la semana? Espero que muy bien!!
Hoy quiero enseñaros un pastel que me encargaron para un cumpleaños...
La verdad es que este pastel me dio más de un dolor de cabeza porque al tener ella esa enorme cabeza sobre ese cuerpecito no sabía como ingeniármelas para que la cabeza no destrozara el cuerpo.
Descarté inmediatamente hacer la cabeza de bizcocho, porque no sabía como iba a vencer las leyes de la gravedad y evitar que la cabeza cayera...
Así que opté por hacerla de RKT (esa mezcla de nubes y krspies). Cuando acabé de darle forma, forrarla con fondant y ponerle los detallitos (ojos, nariz, bigotes y orejas) la coloqué sobre el cuerpo.
Al principio se caía hacia delante, así que la saqué y la volví a colocar. Después, empezó a caerse hacia atrás. Así que la saqué de nuevo y medí cuál era el centro exacto del cuerpo para volver a colocarla. Y cuando lo hice, voilà, no se cayó...
¡Qué feliz estaba yo pensando que mi "genial" idea había surgido efecto!
Nada más lejos de la realidad...
Me fui a hacer unas cosillas y cuando volví la cabeza de tres kilos y medio, nada más y nada menos, había empezado a destruir los pies de mi Hello Kitty.
Así que saqué la cabeza y la tiré a la basura, así tal cual (a veces me enfado y hago estas cosas ;p).
Después de darle algunas vueltas (bajo la presión de que cada vez se acercaba más el momento en el que tenía que entregar el pastel decapitado) decidí intentar hacerla con porexpan.
Nunca antes lo había hecho, pero no se me ocurría nada más, así que me fui a la tienda, compré una pieza de porexpan y empecé a darle forma... Y así quedó!
Al final todo salió bien (aunque en mi comedor parecía haber nevado ;P).
Espero que os haya gustado!
Pasad un dulce día y no os olvidéis de sonreír!