Y en las noches y comidas navideñas son muchas las sobremesas que nos rodean. Otras más divertidas, otras más políticas y otras más aburridas, pero la suma de todas son, en gran parte, la Navidad. Supongo que uno de los motivos por los que me gusta tanto ese instante es porque me gusta compartir mesa con gente a la que aprecio y tengo cariño, o con mi familia que veo de vez en cuando. Y ese momento me teletransporta.
El momento del vermut o del aperitivo es otro de los grandes instantes en los que compartimos nuestras vivencias alrededor de una mesa. A nosotros nos encanta tanto dentro como fuera de casa. Y lo acompañamos con productos de primera como son las aceitunas de Blai Peris (muchos sabéis que no puedo vivir sin ellas) y su producto lo cultivan en su totalidad en la Terra Alta (Tarragona). Su resultado es de un sabor exquisito, sin químicos y de muchísima calidad. Algo que, como podéis suponer, se agradece y mucho.
Además, en esta ocasión lo acompañamos de mini saquitos de brie con frutos secos y de brie con tomate seco en aceite de romero. Son muy fáciles de preparar y están riquísimos.