Sobre avenida Revolución, la casa que alberga a Loretta no aparenta desde fuera ser el espacio ligero y relajado donde puedes sentarte a comer o a cenar y a disfrutar de una larga sobremesa en cualquiera de los dos horarios: la carta se diseño justamente para ofrecer comidas casuales donde estar a gusto es lo más importante.
Crudo de hamachi, sandia infusionada con jengibre y vinagreta de albahaca
De inspiración marcadamente mediterránea, la carta nos presenta platillos conocidos, de moda, pero con el toque particular de Abel. En sus propias palabras, son atascados e intensos. Ciertamente, cada platillo lleva un gran número de ingredientes y sabores, pero finamente equilibrados entre ellos. El crudo de hamachi, por ejemplo, se sirve con pequeños dados de sandía previamente infusionada en jengibre, chiles serranos, chips de ajo, cebolla morada, yuzu y una vinagreta de albahaca.
Burrata loretta, con higos confitados y prosciutto
Otros platillos de nombre inocente, como la burrata o el tagliatelle, sorprenden con el toque de Loretta. La burrata, acompañada de jugosos higos confitados y gruesas rebanadas de pan tostado, es uno de los más populares de la casa.
Clásicos del levante como el hummus, jocoque, aceitunas marinadas, o queso feta se presentan para compartir al centro antes de los platos principales, entre los cuales destacan las pastas y las carnes o pescados a las brasas.
Tagliatelle con ragú de cerdo salvaje
Para acompañar, Loretta tiene una singular carta de vinos: solamente hay etiquetas del viejo mundo. Nada de América ni de México. Laura Santander, sommelier de los tres restaurantes, la diseño de tal modo con la intención de redescubrir con el comensal vinos clásicos europeos, por lo que a diferencia de muchos otros restaurantes, podrás maridar con vinos de regiones como Languedoc, Alsacia, Piamonte o Mosel.
Tapa de rib eye con coliflor al horno
Detrás de la cocina y el concepto de Loretta esta todo un equipo: Loretta, Eloise y Margaret funcionan como un grupo restaurantero con Abel a la cabeza. Aunque comparten ciertos elementos entre ellos, cada restaurante tiene su personalidad, pero es el trabajo del grupo el que los convierte en chic cuisine. Abel, por ejemplo, no entró a la cocina hasta que Nasheli, su esposa y chef de su primer restaurante, tuvo que salirse para tener a su primer hijo. (Quién curiosamente creían que iba a ser niña, de ahí el nombre Eloise).
Cheesecake de baklava
Abel y su gran equipo tienen mucho por delante; aún le faltan por crear un restaurante mexicano y uno italiano, dos de sus culinarias preferidas. Y aunque su fuerte son las carnes y el asador, lo cual le apasionaba desde chico, cada uno de sus locales, como Loretta con su carácter mediterráneo, tiene sus platillos consentidos. Así que si no has descubierto los de este en particular, ¿que esperas?
Loretta Chic Bistro:
Toma nota:
Av. Revolución 1426, Guadalupe Inn, México DF
Tel: 5550 – 1692
Web: loretta.rest
IG: @loretta_rest
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