Esta semana ya esta siendo más tranquila para todos nosotros, los niños ya han empezado la escuela y aunque no tengas, al ir por la calle se nota que están todos ya estudiando.
Yo les hecho de menos, no voy ha decir que no me gusta que estén en la escuela, estudiar es lo mejor que puede tener un niño y que me decís de la relación social , es imprescindible para ellos, Pero aunque tenía ganas de que empezaran la escuela he de confesar que esta semana la casa esta solitaria y les hecho de menos.
Por eso y para compensar he hecho un mini Angel Food de chocolate, que dicen que va bien para animar o ahogar las penas jejeje.
Lo he hecho mini porque los excesos del verano se notan ya en barriga y caderas así que no nos pasemos con el dulce jejeje. En pequeñas dosis mejor.
Pero si lo queréis más grande solo tenéis que multiplicar los ingredientes.
El Angel Food es tan ligero incluso llevando chocolate que no querrás dejar de comerlo. A mi parecer, es una de las maravillas de la repostería. Ligero, sin dulce excesivo y te encantara tanto acompañado de relleno como sin el. A mi me gusta solo con una capa de azúcar glas.
Huele por toda la casa y lo tengo preparado y a recaudo para merendar esta tarde los pequeños de la casa, pero si, lo probare está mañana para compensar que están en la escuela.
Estais listas para la receta?
Molde normal de 15 cm x 6cm
Ingredientes:
40 gr de harina normal
100 gr de azúcar blanco
4 claras de huevo L
1/2 cucharadita de cremor tártaro
1/2 cucharada de zumo de limón
1 cucharadita de vainilla
una pizca de sal
15 gr de chocolate puro en polvo
Azúcar glas para espolvorear y decorar
Batiremos las claras de huevo en la batidora empezando a baja velocidad he iremos incrementando la velocidad hasta máxima gradualmente.
En ese proceso cuando las claras espumen (llevarán un minuto más o menos batiendose) añadiremos en cremor tártaro, el zumo de limón y la sal y seguiremos batiendo hasta formar un buen merengue de picos suaves, no duros, son los picos bien formados pero que se curvan hacia abajo.
Cuando tengamos formado en merengue bajaremos a velocidad media e iremos añadiendo despacio 80 gr de harina y él azúcar, bate lo justo para que se integre, más o menos 1 minuto.
Ahora sube la velocidad de la batidora al máximo hasta que ese merengue que tienes ahora forme picos duros, ahora silos picos no deben bajarse.
Una vez lo tengamos sacaremos el bol de la batidora y con una espátula y con movimientos envolventes suaves acabaremos de añadir el resto de la harina, cuidado no se os baje el merengue mucho.
Pasaremos la mezcla al molde previamente engrasado con cuidado y hornearemos a 160ºC unos 25 minutos.
RECORDAR SIEMPRE COMPROBAR QUE NUESTRO BIZCOCHO ESTA HECHO ANTES DE SACARLO DEL HORNO, CADA HORNO ES UN MUNDO. YO OS DOY TEMPERATURA Y TIEMPO DE MI HORNO EL VUESTRO PUEDE VARIAR UN POCO TEMPERATURA Y TIEMPO.
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Una vez horneado y comprobado de que está totalmente hecho, lo sacamos del horno y lo colocamos en nuestra rejilla para que coja temperatura ambiente pero con el molde del revés, si si, del revés, boca abajo.
Este bizcocho es tan ligero que si lo dejamos enfriar como el resto de bizcochos se nos deshinchará, no habremos hecho nada malo en la mezcla ni en el horneado es por su estructura tan ligera e inestable.
Al dejarlo del revés lo obligamos a tener su estructura intacta y al enfriarse se quedara así.
Dejarlo enfriar por completo en el molde, hay que tener paciencia, si lo hacéis antes se os romperá. Dicen que lo bueno se hace esperar así que una hora no nos la quita nadie de espera.
Una vez enfriado ya puedes parle la vuelta despegar los laterales y desmoldarlo.
Ponlo en una base bonita y espolvorea mucho azúcar glas por encima, no habrás comido nada igual en tu vida, te lo aseguro.
Cuéntame, te ha gustado?
Mil besos dulces
Fuente: este post proviene de Cakepuntcom, donde puedes consultar el contenido original.
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