Supongo que dicho así no tendrás nada claro de que va la cosa. Déjame que te ponga en antecedentes.
He tenido una infancia feliz. Recuerdo veranos de hogueras, paseos en bici, juegos en cuevas en la playa, despertares con olor a pan tostado y meriendas con amigos. Entre todas estas vivencias recuerdo Navaleno con mucho cariño.
Mis tíos tenían casa en Navaleno, una pequeña localidad a unos 50 kilómetros de Soria. Y durante unos cuantos veranos fuimos a veranear.
Allí había mucho que hacer y ver. Detrás de la casa había un pinar dónde mis hermanas, mis primos y yo podíamos pasar horas muertas viendo zapaburus, preparando ramitos de flores silvestres o “investigando” en los alrededores de la fábrica de hongos y setas que había allí cerca. (Más tarde he descubierto que se trata de Arotz, lo que disfrutaría ahora viendo como trabajan…)
Otras veces nos llevaban a San Leonardo de Yagüe, un pueblo cercano donde íbamos al mercado y tomábamos el aperitivo en alguna terraza. O íbamos de ruta al Cañón del Rio Lobos y veíamos las grutas llenas de buitres que volaban sobre nuestras cabezas o nos llevaban a La Laguna Negra. ¡Cualquier plan era una aventura a esa edad!
Relleno para sándwiches. La receta secreta de Navaleno
Y luego estaba EL PLAN.El plan era ir al pantano. E ir al pantano significaba, para mi madre y mi tía, organizarlo todo el día anterior. ¿Por qué? Porque llevaban lo que siempre hemos llamado en casa “la mezcla secreta de Navaleno”
Cuando leas la receta verás que, aunque no es complicada de hacer, lleva un poco de elaboración, motivo por el que la preparaban la víspera. El pan en el que se ponía esta mezcla secreta, una hogaza plana con muy poca miga, nos lo hacían por encargo en la panadería del pueblo. Así que cuando nos mandaban a encargarla ya sabíamos lo que significaba… ¡Mañana nos vamos al pantano!
Supongo que además de la receta secreta llevaban alguna ensalada para completar la comida, así que te dejo por aquí algunas de las publicadas, puede que te sirvan de inspiración.
Me acabo de dar cuenta que me he dejado llevar por los recuerdos y que probablemente lo que te apetece es descubrir que es esto de la receta secreta. A mi me ha encantado reproducirla, y como ves me ha hecho recordar momentos preciosos de mi infancia. Espero que te guste y la disfrutes este verano.
Una última puntualización: El ingrediente principal de este relleno para sándwiches es el bonito en escabeche. Te recomiendo que utilices uno de calidad y de confianza. En mi caso he utilizado este bonito en escabeche de Conservas Olasagasti.
Fotografías y texto propiedad de Gourmet Bilbao