Otra vez yo por aquí, para contarles el truco con el que conseguí incorporar las semillas a la dieta de todos los días.
Como a muchas personas, me gusta comer cada vez más sano pero algunos ingredientes se me hacen más difíciles de incorporar a mi dieta que otros. Entre ellos están las semillas.
Las hay de muchos tipos y todas son muy buenas para el organismo, sobre todo para el aparato digestivo. Es fácil comer un pan con semillas o una galleta con semillas... ¡pero no siempre lo tenemos a mano!
Con esta receta de polvo de semillas que les dejo en video a continuación, he logrado que las semillas acompañen mi dieta diaria sin mucho esfuerzo... y sobre todo la de mi niño, que hasta el momento no quería saber nada!
Que la disfruten y apliquen, seguro les gustará.
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¿Cómo utilizar este polvo de semillas?
Es ideal para usar sobre:
Panes: con manteca, con queso untable, con manteca de maní, ¡con lo que quieras! da un toque crocante y aromático.
Yogurt: en el desayuno, en el yogurt con cereales, frutas o miel, espolvorea una cucharada de polvo de semillas.
Ensaladas: Uso estas semillas en la mayoría de mis ensaladas, sobre todo en las de hojas verdes, quedan geniales.
Sopas: ¡sobre sopas o cremas! además dan un toque decorativo.
Jugos o zumos: incorporar una cucharadita a batidos o smoothies. Los harán súper energéticos.
Masas: de panes, de pizza... ¡de lo que se te ocurra!
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