El relleno en esta ocasión es de crema de cacao de dos sabores: blanco y negro, pero podemos hacerlo con la clásica nutella o cualquier otra crema de cacao e incluso algún otro relleno como cabello de ángel, mermelada... También podemos hacerlo salado con unas lonchas de queso y salsa de tomate, de pesto, atún, gambas...
Ingredientes
2 láminas de hojaldre (mejor rectangulares)
200gr. crema de cacao
1 huevo
Azúcar glass (opcional)
Extendemos una de las placas de hojaldre y la cubrimos con crema de cacao.
Cubrimos con la otra placa de hojaldre. Deberemos colocarla con cuidado, pues una vez se coloca la placa encima ya no podremos despegarla.
Con un cuchillo recortamos las esquinas superiores e inferiores de manera que demos la forma de árbol triangular en la parte superior y la forma de maceta en la parte inferior.
Con uno de los trozos sobrantes hacemos la forma de una estrella que colocaremos en la parte superior del hojaldre. Para que la estrella quede bien recomiendo utilizar un molde de galletas con dicha forma (yo no tenía ninguno a mano y no me quedó muy bien, pero con un corta pastas quedará perfecta).
Con el cuchillo o un corta pizzas proseguimos haciendo cortes horizontales a ambos lados del hojaldre, sin llegar al centro.
Cada rama que hemos cortado la retorcemos sobre sí misma un par o tres de veces, haciendo tirabuzones.
Finalmente, pintamos toda la superficie con huevo batido.
Y ya sólo nos quedará hornear nuestro árbol a 200ºC durante 12-15 minutos.
Ya tenemos listo nuestro árbol de Navidad para degustarlo como postre o como merienda con nuestros familiares o amigos. Acompañado de una taza calentita de café, chocolate deshecho, infusión o té será toda una delicia.
En mi casa ha sido todo un éxito, voló en menos que canta un gallo
Con el resto de trozos de hojaldre que nos habrán sobrado al recortar la forma del árbol, podemos hacer más estrellas, o palitos retorcidos como hemos hecho con las ramas,