¿Te gusta el caramelo? Pues si es así estás enhorabuena, pues te traigo la forma de hacer caramelo líquido para guardar. Es muy fácil.
Primero veamos el vídeo y luego te dejo las instrucciones.
Hoy te voy a enseñar a hacer caramelo líquido, que lo puedes usar en cuanto se enfríe o lo puedes usar o guardar para cuando lo necesites, en un recipiente hermético.
CONSEJO: Mucho cuidado con la manipulación del caramelo caliente. Dicho esto, vamos a las instrucciones:
Primero poner a hervir una taza de agua.
Luego y APARTE, pon una taza de azúcar granulada en una olla SIN AGUA y al fuego. Siempre revolviendo con una cuchara o incluso mejor, con una paleta de silicona, que luego es mucho mejor para lavarla. Una vez que toda el azúcar haya tomado consistencia líquida y un tono dorado, agrégale un c horro de agua hirviendo y sácala del fuego. Ojo¡¡ que aquí salpica el caramelo por lo que te recomiendo hacerlo de lejos. Para evitar que toda la cocina y encimera les caiga caramelo, puedes poner un paño de cocina en la encimera, encima la olla y ahí haces el proceso de agregar el agua caliente. Así, lo que salpique irá al paño y no a la encimera en sí. Vamos.. un consejo para que luego no te cueste tanto limpiar.
Retira la olla, vierte el caramelo en un recipiente que aguante el calor y deja enfriar. A medida que va enfriando, el caramelo va poniéndose más espeso.
Consejos: Si te gusta el caramelo rubio, no dejes que se pase mucho de tiempo. A mi personalmente no me gustan los caramelos muy quemados porque tienden a ser amargos.
Guárdalo en un recipiente hermético. No es necesario que lo guardes en la nevera.
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