Una invitación en casa puede cumplir los más diversos objetivos: celebrar un aniversario, ofrecer nuestra casa a unos nuevos amigos, comunicar una noticia, agasajar a nuestro jefe, pasar un buen rato con unos amigos, etc.
Tanto el objetivo de la invitación como las características de los invitados marcarán el tipo de encuentro y el grado de formalidad.
?Cómo invitar?
Aunque cada vez más se desestima la invitación escrita, ésta es imprescindible para una invitación formal a una celebración con gran número de invitados y especialmente si el acto no se celebra en el domicilio de los anfitriones.
En este caso, podemos enviar una invitación personal a través de una tarjeta o carta. En el caso de que los invitados sean muy numerosos, podemos optar por las invitaciones impresas. Las papelerías de calidad y las imprentas nos pueden aconsejar sobre el tipo de papel más adecuado, pero siempre tiene que ser de calidad y guardar el estilo de todo el acto que se va a realizar.
Se deben enviar con tiempo suficiente para que los invitados puedan organizar su agenda y realizar todos los preparativos. No es adecuado enviar una invitación por fax.
Si la celebración es un acto más bien informal, se puede llamar por teléfono o enviar un correo electrónico. En este último caso, debemos asegurarnos de que el destinatario lo ha recibido y de que estará redactado correctamente, ya que estos mensajes no suelen ser ejemplos de corrección lingüística.
Sea cual sea el método para formalizar la invitación, debemos conceder un período de respuesta. Si el propio interesado no nos responde, deberemos solicitar confirmación vía telefónica.
Para evitar al máximo esta situación, es conveniente incluir en la invitación escrita las siglas RSVP (del francés Répondez s´il vous plaît) o SRC (del castellano Se ruega contestación).
Si el lugar escogido para el acto no es conocido por los invitados, estos le agradecerán que adjunte un pequeño plano de situación. En las invitaciones informales se puede proporcionar un número de teléfono móvil de los anfitriones al que acudir como último recurso.
?Podemos mencionar los regalos en la invitación?
Es de pésimo gusto sugerir algún tipo de regalo en la invitación. Siempre se debe dar por hecho que los invitados no están obligados a regalar. Algunas personas hacen mención expresa de este tema con la frase "No se aceptan regalos".
?A quién invitamos?
En una sociedad moderna y cambiante como la nuestra, es prudente informarnos del estado civil de nuestros invitados, si pueden asistir acompañados. Si se trata de una pareja, es preferible dirigir la invitación a los dos, escribiendo los respectivos nombres y apellidos en el sobre. Si se dirige a una familia, no olvidemos el apellido materno. Por ejemplo: Familia Cortés - Montalvo. Si no hacemos mención expresa de los niños, éstos no están invitados.
En el caso de una fiesta infantil deberíamos tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Además de la invitación que recibirán los niños, se debe formalizar el ofrecimiento a los padres. Con una llamada telefónica bastará para informarles de los detalles de la fiesta y obtener la confirmación de asistencia.
- Debemos procurar que las edades de los niños invitados no sean muy dispares.
- Se trata de una fiesta infantil y los invitados lo son de nuestros hijos, por lo tanto, ellos deben decidir quién asistirá y quién no.
?Debemos indicar la indumentaria adecuada?
Además de informar del tipo de recepción que se pretende llevar a cabo (comida, cóctel, buffet, cena, etc.) para que los invitados sepan qué se espera de ellos, se puede indicar la indumentaria requerida especialmente en actos semiformales. Aunque parezca una imposición, evitaremos de esta manera situaciones incómodas para todos los asistentes.
No olvidemos revisar la lista de asistentes unos días antes de la recepción y confirmar su presencia. En esta lista debemos anotar los nombres de los acompañantes, lo que nos evitará confusiones y situaciones engorrosas el día de la celebración.