Si normalmente la alimentación es fundamental para la salud, ésta debe cuidarse especialmente durante los 9 meses de un embarazo, incluso antes de él y en el periodo de lactancia se debe tener una dieta variada en el embarazo, puesto que en este caso, lo que se come, no sólo afecta a la madre, sino también al futuro bebé.
Durante muchos años siempre se decía que las embarazadas debían comer por dos, pero en las últimas décadas esto no se escucha por parte de los ginecólogos, puesto que el control de peso es fundamental durante la gestación para garantizar que no se desarrollen problemas de salud en ese periodo (como hipertensión o diabetes gestacional) y que el parto sea más fácil. En cambio ellos consideran el hecho de tener una dieta variada en el embarazo.
Cada mujer es distinta y, así, dependiendo de sus análisis generales al inicio del embarazo, su peso, o sus posibles problemas de salud, podrá tener alguna restricción alimenticia, pero por lo general, y excepto los alimentos prohibidos para las embarazadas (como embutidos, pescados crudos, carne poco cocinada, etc.), deben comer de todos los grupos de alimentos, repartidas las ingestas de comida en unas 5 veces al día, donde es más aconsejable que prime la calidad de lo que se come y la variedad, que la cantidad, de esta manera tendrá una dieta variada en el embarazo.
De forma orientativa, los alimentos y cantidades más o menos recomendadas que es aconsejable que coman las mujeres embarazadas son:
- Lácteos: unas 3 o 4 raciones de leche, yogures o quesos (pasteurizados). Es mejor escoger las opciones bajas en grasa o desnatadas.
- Fruta y verdura: en total entre 2-4 piezas de fruta y entre 3-5 de verduras, considerando una ración de ésta una taza. En muchos casos se aconseja, por ejemplo, que la comida o la cena tenga de complemento una ensalada de hortalizas variadas, una forma de asegurarse la ingesta vegetal a diario.
- Proteína: entre 2-3 raciones, en la que tienen cabida huevos, carnes y pescados. En el caso de la carne, apostar más por la carne magra y en los pescados alternar entre pescado blanco y azul.
- Cereales, pan, pasta: entre 6 y 11 raciones son aconsejables y mejor si son integrales. Una ración puede ser una rebanada de pan o unos 100 gr de arroz o pasta. Los hidratos que proporcionan son muy recomendables porque aportan energía.
¿Cuidaste especialmente tu alimentación durante el embarazo?
Imágenes: primera, molly_darling/Flickr; segunda, epSos.de/Flickr