Las mejores Galletas de Maicena y leche condensada.
Hoy en día en el mercado podemos encontrar una infinidad de tipos de galletas, en cualquier supermercado y abastos e incluso en el mercado, se supone que las galletas todas están hechas de ingredientes de calidad pero las mejores son las caseras, las echa en casa, se dice que en la actualidad las galletas son crujientes y muy esponjosas pero que en la antigüedad no eran así.
En la antigüedad las galletas eran planas como obleas, eran duras, y muy delgadas, en esos tiempos de roma las galletas se presentaban en forma de biscocho, por la estructura de esa galletas por su dureza fue donde apareció el nombre de cracker.
En la edad media, las galletas eran unos biscochos endulzados. En la edad moderna las galletas se convirtieron en torta-galletas, quien introdujo las galletas al nuevo continente fue Cristóbal Colon.
Durante los siglos XVI y XVII, las galletas ocuparon un lugar muy importante en los diferentes barcos que emprendían sus viajes para conocer nuevos horizontes, ya que ellas eran las que sustituían el pan, por lo que la durabilidad era mayor que los del pan y por su fácil conservación. Para el siglo XIX, las galletas juagaron un papel muy importante en su función social, ya que estaba presente en la dieta de los mineros.
También las usaron en las dietas de los soldados en la primera y segunda guerras mundiales.
La galleta era un producto muy alimenticio de forma plana, pequeño y circular, de gusto dulce, horneadas, hechas normalmente de harina, huevos, mantequillas o cualquier otra materia grasa.
Las galletas de Maicena y Leche Condensada son muy buenas porque las podemos consumir a cualquier hora del día, cuando queremos tomar en alguna merienda, cuando tomamos un descanso a media tarde con un rico café, etc.
Después de varios años viendo muchas recetas me he animado en preparar estas deliciosas galletas ya que son fáciles de hacer, económicas y muy ricas. Su textura es muy especial, ya que la maicena, también llamada harina de maíz, es muy peculiar al gusto, se parece mucho su textura ala de los alfajores argentinos que van rellenos de dulce de leche.
Otra opción para estas galletas es que puedes colocarlas en el horno solo en forma de bolitas, sin aplastarla, también puedes hacerles un hueco en el centro de la masa y rellenarlo con mermelada, esta opción es muy rica.
Esta receta de galletas es muy familiar, estas ricas galletas las puedes comer con te, no vas a creer el tiempo en que la podemos realizar, lleva solamente cuarenta minutos en prepararlas y son espectaculares.
Cuando la vayas a meter en la nevera para que repose la masa, es recomendable hacer unos rollitos y envolverlas en papel film, para que cuando la vayas a cortar sea mucho más fácil.
Estas galletas llaman mucho la atención por su color blanco y lo delicadas que son al comerlas. Al gusto del paladar son como pastosas, eso es lo que las caracteriza.
En mis investigaciones de diferentes recetas, he encontrado esta exquisita receta que también la pueden consumir las personas que padecen de la enfermedad de celiacos, ya q estas galletitas no contienen gluten.
También son galletas que las pueden consumir los niños pequeños por su facilidad de triturarse en la boca, su sabor dulce, son muy divinas para los más pequeños de la casa. También las puede hacer los niños ya que son muy fáciles de hacer con ayuda de un representante ya que tienen que utilizar el horno.
Ingredientes para hacer Galletas de Maicena y leche condensada.
Una yema de huevo.
Trescientos cincuenta gramos de maicena.
Ciento veinticinco gramos de mantequilla.
Doscientos gramos de leche condensada.
Dos cucharadas de azúcar.
Preparación de Galletas de Maicena y leche condensada.
En una batidora, colocamos en un bol preferiblemente de vidrio colocamos la yema de huevo, la mantequilla en temperatura de ambiente cremosa, el azúcar y la leche condensada. Luego le colocamos la maicena previamente cernida y mezclamos bien estos ingredientes.
Dejamos que se enfríe en la nevera esta masa por treinta minutos aproximadamente. La retiramos después de este tiempo
Una vez lista la masa la masamos bien, hacemos bolitas, pequeñas, y las aplastamos bien con un tenedor.
En el horno previamente pre calentado a ciento sesenta grados (160) metemos las bolitas en una bandeja enmantequillada por un periodo de doce minutos.
Y listo eso es todo, espera que se enfríen y a comer.
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