Después de años viendo esta receta por las redes sociales este fin de semana me he animado a prepararlas y la verdad es que son fáciles, bonitas y ricas. Lo tienen todo!!!
Su textura es muy curiosa, la maicena (harina de maíz) es muy peculiar al gusto, tiene un punto etéreo.
Recuerda mucho a las pastas de los alfajores argentinos que van rellenos de dulce de leche, otro vicio de dioses.
Galletas de leche condensada y maicena
Ingredientes
1 yema de huevo
125 gr. de mantequilla
200 gr. de leche condensada
350 gr. de maicena
20 gr. de azúcar blanca
Elaboración
Con la batidora mezclamos la yema, la mantequilla (a temperatura ambiente), la leche condensada y el azúcar. Según se lee la receta, una piensa: con tanta leche condensada no hace falta azúcar, pero la verdad es que no sobra, si queréis podéis añadir un poco más o por ejemplo ralladura de limón, seguro que le queda genial.
Se tamiza la maicena y se mezcla con las manos con el resto, es muy manejable y fácil de hacer.
Dejamos que se enfríe en la nevera alrededor de 30 minutos y entonces hacemos bolitas del tamaño de una nuez, con la ayuda de un tenedor aplastamos la bola para darle tan característica forma.
Se cuecen en el horno (precalentado) unos 12 minutos a 170ºC con calor arriba y abajo, cuidado no se doren en exceso, sacar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Con estas cantidades salen alrededor de cuarenta galletas.
Receta tomada del blog corazón de azúcar.