Ya lo he dicho en más ocasiones, mis tartas favoritas son las que llevan la masa del Apple Pie y el relleno es de fruta, en este caso unas ciruelas verdes que como tal no estaban muy ricas, pero en tarta han estado insuperables.
Cualquier fruta que tengáis en casa que se está pasando o simplemente queréis disfrutar de un rico postre, éste es una receta que siempre gusta. Que la disfrutéis.
Tarta de ciruelas verdes
Ingredientes
Para el relleno
1 cucharada sopera de agua
3 cucharadas de ron añejo
El zumo de un limón
800 grs. de ciruelas verdes
25 gr. de mantequillaPara el relleno en la segunda fase
50 gr. de tapioca
80 gr. de azúcarPara la base
300 gr. de harina
1 pizca de sal
145 gr. de mantequilla fría
Agua fría (la que necesite)Para la decoración
Leche
Azúcar
Elaboración
Lo primero que vamos a realizar es el relleno (su primera fase), para que luego tenga una temperatura ambiente o podéis hacerlo un día antes, sin problema. Lavamos, deshuesamos y cortamos en trozos las ciruelas, las colocamos en la cacerola con la mantequilla, se rehoga por un par de minutos y después se echan los demás ingredientes, sin parar de remover e ir espachurrando la fruta, en el fuego debe estar en total unos 6 minutos. Apagamos y reservamos.
Ahora nos ponemos con la masa, en un recipiente hondo ponemos la harina, la sal, la mantequilla fría a daditos pequeños; con las manos empezamos a deshacer este último ingrediente, tiene que quedar una masa como si fuera arena, sin unión, ahora vertemos un poco de agua fría, vamos echando y amasando hasta conseguir una textura compacta y sólida, en total no es mucha agua. Lo tapamos y dejamos en la nevera mínimo 30 minutos.
Vamos ya con su montaje y cocción, tomamos 2/3 de la masa y cubrimos la base y los bordes del molde, tomamos un poco de los 50 gramos de tapioca y hacemos una leve capa que cubra la superficie de la tarta, este truco va a conseguir que la masa no se empape del jugo de la fruta, podéis usarlo para cualquier tarta de este tipo que lleve una fruta con mucha agua, hará que el relleno quede jugoso y la masa tipo pasta.
El resto de tapioca lo mezclamos al relleno de ciruelas junto con el azúcar, lo vertemos en sobre la masa y pasamos a decorar. Yo esta vez opté por un enrejado sencillo, no anduve calculando cómo colocar las tiras de masa, fui improvisando. Con un rodillo hice una plancha con el resto de masa que sobraba y lo fui decorando. Por último pincelamos la masa con leche y espolvoreamos azúcar.
En el horno precalentado, sólo con calor abajo a 180ºC unos 50-60 minutos, cuando ya ves que la masa está cocida y doradita.