La cocina italiana es una de las preferidas por cualquier tipo de comensal. Por ello, si tienes invitados y quieres sorprender, pero a la vez, dejarlos con el estómago lleno, nada mejor que elaborar especialidades italianas.
Todos hemos hecho pasta mezclada con salsas o queso alguna vez, pero para comer verdadera cocina italiana cómodamente desde casa, es de suma importancia ir a comprar los ingredientes en las diferentes tiendas especializadas que encontraremos en prácticamente todas las ciudades. En algunos centros comerciales y tiendas delicatessen o gourmet también hay diversos productos. Lo mejor de tales establecimientos es que hay una gran variedad de pasta, rellena o no, y la puedes comprar a peso.
Ingredientes originales
Para los italianos, la mayor parte de ingredientes que encontramos en tales tiendas no tienen nada de especial, pero para los españoles se trata de productos algo originales que dan un sabor inconfundible a los platos.
Pastas: Picci es un tipo de pasta común en la región de la Toscana de bastante contundencia. Son similares a los espaguetis, pero más gruesos. Se comen mezclados con varias salsas de diferentes sabores. Los Lunotti también es una original pasta en forma de media luna que suele estar rellena de calabaza, de queso Gorgonzola o de setas.
Quesos: entre otros, es tradicional comprar Parmigiano Reggiano porque es lo que mejor casa con la gran parte de los platos a preparar. No es lo mismo comprar el auténtico Parmigiano que sucedáneos o Grana Padano, una variedad más económica del original. Para ello, basta con mirar el sello de Denominación de Origen que llevan todos estos quesos.
Si quieres sorprender, hay más variedad de quesos italianos, desde el Pecorino, queso de oveja de sabor más fuerte o más tierno; el Crescenza, más blando y de leche de vaca; pasando por la Ricota, ideal como relleno de pasta fresca. Es el requesón por excelencia.
Condimentos: no descubrimos nada si hablamos del famoso vinagre Aceto Balsámico de Módena. Éste también tiene Denominación de Origen y el auténtico suele ser bastante caro, por ello se venden muchas otras clases, que si bien no son puros acetos de Módena, tienen también un sabor exquisito. Sólo paladares muy exigentes encuentran las diferencias.
El aceite aromatizado a la trufa blanca es un condimento especial para añadir a las pastas, ensaladas y hasta carnes y guisos. Otorga un sabor algo fuerte, por lo que no se debe abusar demasiado de él.
Recetas sencillas
Te ofrecemos algunas recetas, fáciles y sencillas, de platos italianos:
Risotto al vino tinto
Ingredientes para 4 personas:
1 vaso de arroz.
1 cebolla pequeña picada.
1 diente de ajo entero.
½ vaso de vino tinto (del que sea y tengas ya abierto).
1 vasito de crema de leche.
150 gr de Parmigiano Reggiano rallado.
1 vaso de caldo de carne, verdura o pescado.
aceite de oliva, sal, albahaca al gusto o aceite de trufa blanca.
Elaboración:
Doraremos la cebolla una vez picada en el aceite junto con el ajo sin pelar. Cuando esté bien dorada, añadiremos el arroz para que no se deshaga posteriormente y le damos un par de vueltas. Agregamos el caldo, preferiblemente caliente para que no nos pare la cocción del arroz y el vino tinto.
Luego, lo dejaremos cocer a fuego medio hasta que haya absorbido casi todo el líquido y, en el último momento, añadiremos el queso y removeremos para que quede con la consistencia cremosa que deseamos. Podemos adornar el risotto con un poco de albahaca. El tiempo total de la preparación es de unos 30 minutos.
Auténticos Tagliatelle a la Boloñesa
Los que solemos comer en nuestro país poco tienen que ver con el auténtico plato de Italia. Solemos poner tomate y algo de carne, cuando en realidad el plato se realiza con trozos de carne picada y algo de salsa de tomate natural, pero muy poca.
Ingredientes para 4 personas:
300 gr de tagliatelle.1 cebolla pequeña picada.
1 diente de ajo.
1 tomate maduro picado.
200 gr de carne de ternera picada (no muy fina).
aceite de oliva.
sal, pimienta, albahaca y Parmigiano Reggiano rallado.
Elaboración:
Hervir la pasta en abundante agua con un puñado de sal sin tapar durante 7 minutos, para que quede al dente. Para realizar la salsa boloñesa, doraremos la cebolla finamente picada hasta que esté tierna y añadiremos el tomate (previamente picado) junto a la carne picada y sazonaremos. Podemos añadir una cucharadita de azúcar para corregir la acidez del tomate.
Cuando la carne esté hecha, pero aún jugosa, serviremos la salsa sobre la pasta y añadiremos el Queso Parmigiano al gusto.
Descubre más recetas italianas
Imágenes: Guillermo Pérez y Facilisimo.com