Para algunos celíacos, las vacaciones son un problema, en vez de ser una época festiva y lúdica. Todos conocemos a celíacos que no se atreven a ir ni a hoteles ni a restaurantes, pues el comer fuera de casa les crea diversos inconvenientes y no pocos temores. Muchos de ellos demandan restaurantes y hoteles donde sirvan menús sin gluten, a lo que la Asociación de Celíacos de Madrid desea hacer una serie de puntualizaciones.
El que existan menús sin gluten para celíacos, (pasta italiana, corquetas, rebozados, etc. sin gluten) es hoy por hoy un objetivo prácticamente inalcanzable por varios motivos:
Por el momento, el colectivo celíaco no es tan numeroso para que sea rentable. "Es cuestión de oferta y demanda nos guste o no", afirma la Asociación de Celíacos de Madrid. Existe una imposibilidad real de realizar una vigilancia y comprobación de materias primas, manipulación, contaminación cruzada, etc.
No obstante, esto no tiene por qué impedir comer fuera de casa, ya que cualquier restaurante dispone de forma habitual en la carta de platos sin gluten. Hay que distinguir entre ingesta de gluten e ingesta de trazas de gluten. Las trazas no las vamos a poder evitar. Todos deseamos una dieta con contenido cero en gluten, sin embargo, hoy por hoy, según la Asociación, esto es una utopía.
Por todo ello, es importante tener en cuenta algunos consejos para comer fuera de casa, con los mínimos riesgos posibles:
En el bar, hotel o restaurante, di que eres celíaco.
Explica lo que puedes y no puedes tomar.
Pregunta al camarero o al encargado del restaurante por los ingredientes de los platos que sirven.
No te aventures a pedir platos que conllevan riesgos: guisos, salsas, sopas, embutidos, etc.
Si te preocupa el desayuno o la merienda por no disponer de pan, galletas, magdalenas, etc, siempre podrás tomar: leche, zumos, fruta, yogur, queso, jamón serrano, de york, huevo, chocolate, frutos secos, etc.
Si no puedes pasar sin productos sin gluten, lleva provisiones que sepas que no vas a encontrar fácilmente en el lugar de vacaciones.
Si viajas al extranjero, en las Asociaciones de Celíacos pueden facilitarte una tarjeta, en distintos idiomas, explicando lo que puedes y no puedes comer, para mostrar en los restaurantes. Si vas a permanecer un largo periodo, puedes contactar con la asociación del país. Has de pasar unas felices vacaciones, sin pensar que los problemas de tu dieta sin gluten son mayores de lo que en realidad son. No dejes de hacer nada por el hecho de ser celíaco.
La mayor parte de los celíacos realizan una dieta estricta sin gluten, acuden a bares, comen en restaurantes cuando la ocasión se les presenta, hacen una vida completamente normal, crecen y se desarrollan como cualquier otra persona no celíaca. Esta evolución positiva se refleja en sus revisiones médicas, analíticas y anticuerpos negativos.
Imágenes: primera y tercera, Mac Hotels/Flickr; segunda, gareth1953 Got My Bus Pass Now/Flickr; tercera, wwootton1/Flickr.