La Denominación de Origen Rías Baixas, que encontramos al norte de España, ha seducido los mercados extranjeros. Las cepas que nacen junto al Atlántico, en suelos arenosos, producen un vino de gran calidad y aceptación en países como Estados Unidos, consumidor por excelencia, y Gran Bretaña. Además, las reseñas en las más importantes revistas y guías internacionales elogian su gran calidad.
En el país norteamericano las ventas aumentaron en un 71% la pasada temporada y un estudio de la empresa Datamonitor prevé en Gran Bretaña un aumento del 16% en los próximos años. No olvida el Consejo Regulador la inclinación de China por todo lo occidental que hace que su mercado sea de gran interés para la exportación. Ya en el 2004 los vinos de la D.O. Rías Baixas participaron en la feria Food & Hotel China que se celebró en Shangai.
El mercado internacional
Asimismo, el aumento de referencias y artículos dedicados a Rías Baixas ha aumentado en la prensa extranjera. Uno de los grandes gurús del vino, el catador Robert Parker, ha afirmado en la revista Food & Wine que España es un líder emergente en vinos de calidad y creatividad, e incluye siete caldos de esta Denominación en su guía Wine Advocate. En el periódico Wall Street Journal se elogiaron también los vinos gallegos por alejarse de los actuales métodos de producción industrial. En un reportaje de Tim Alkin, publicado en la revista Life, se destaca la combinación de tradición y modernidad en la elaboración de los caldos.
Además, el Consejo Regulador está promocionando los vinos en los mercados internacionales y sus diferentes ferias, con promociones en puntos de ventas, marketing y formación. Durante los próximos tres años, Rías Baixas representará a los vinos blancos de calidad en Estados Unidos, aunque ya ha estado presente en ferias europeas como Prowine en Alemania o en la London Wine.
Un gran producto
La Denominación de Origen de Rías Baixas se extiende por la provincia de Pontevedra y abarca cinco comarcas: Valle de Salnes, Condado do Tea, O Rosal, Soutomaior y Ribera do Ulla.
Las uvas que se utilizan para la elaboración de estos vinos son las blancas, las más comunes, y variedades tintas, muy escasas. Entre las blancas destacan la Albariña, de grano muy pequeño y muy dulce, la Loureta, de gran calidad y una de las más aromáticas junto a la Treixadura, o la uva Torrontés, que produce vinos de poco cuerpo y de buena acidez.
La variedad de vinos los hace más atractivos si cabe, y aptos para diferentes gustos u ocasiones. Los blancos son secos de aromas frutados y florales con un gusto fino y prolongado; los de tipo Albariño, frescos y suaves, tienen aromas distinguidos; y los de tipo Rosal o Condado do Tea destacan por sus aromas intensos y de ligera acidez.
Los blancos maridan bien con platos ligeros y con pescados, y los de crianza pueden acompañar carnes blancas. Un Albariño es una buena sugerencia para el marisco, crustáceos a la parrilla o moluscos de cosecha.
