Ingredientes (4 personas)
- Un kilo de langostinos (frescos o cocidos).
- Dos aguacates maduros.
- Dos cucharadas de salsa de soja (también podría ser una cucharada de soja y una de mayonesa).
- Una cebolleta.
- Unas 6 cucharadas de aceite de oliva.
- Un limón.
- Cebollino.
- Sal y pimienta.
Preparación
El primer paso es tratar con los langostinos. Son mas cómodos por supuesto los que ya vienen cocidos, además están siempre muy ricos, vamos, pero si preferís los crudos, primero hay que cocerlos durante uno dos minutos en abundante agua salada hirviendo y más tarde los pasamos por agua fría o con hielo para cortar la cocción. Los escurrimos bien, lo pelamos y los cortamos en trocitos finos. Ahora los reservamos los langostinos en un bol, salpimentados.
Ahora picamos la cebolleta muy finita y también la ponemos con los langostinos en el bol.
También picamos el cebollino muy pequeñito y al bol también.
Incorporamos la salsa de soja, (si hemos elegido la mayonesa pues también), un chorrito de aceite de oliva (yo no uso el virgen porque me parece muy fuerte su sabor, pero si os gusta más, usad ese) y el zumo de un limón. Mezclamos todo muy bien.
Ahora sacamos el aguacate. La manera más fácil es cortarlos con un cuchillo a la mitad, y vaciarlo con una cuchara. El aguacate debe estar maduro (o sea blando) si no no es tan comestible. Se retira el hueso, que es bastante fácil y la carne del aguacate la cortamos en dados pequeños.
Mezclamos los dados con el resto de la mezcla con bastante cuidado que no se deshagan del todo.
Lo dejamos macerar todo en la nevera tapado con papel film transparente durante al menos media hora, pero si es una mejor, ya que le vendrá muy bien el proceso.
Hora de emplatar
A la hora de emplatar, podemos darle forma con un aro para ello y lo decoramos a nuestro gusto, por ejemplo con cebollino picado por encima, unas gotas de mayonesa, y también uno o dos langostinos (dependiendo el tamaño) enteros encima del tarta.
Si no tenemos el famoso aro de emplatar, podemos ponerlo en una copa a modo de coctel de gambas, decorando igualmente la parte superior.
Pues este plato ya está listo, como veis es bien sencillo, y para los amantes del aguacate como lo soy yo, es riquísimo, algo diferente y original, a la típica ensalada o coctel de mariscos para comenzar una buena comida tanto formal como menos formal.