En primer lugar quería pediros disculpas por este parón inesperado de dos semanas y sin previo aviso. Pensé que me daría tiempo a montar todas las recetas que tenía guardadas a tiempo pero me ha sido imposible.
La última semana de junio tuvimos la fiesta de fin de curso de la guarde donde trabajo. Todo salió como esperábamos pero no calculé bien los tiempos y al final solo me daba tiempo a dedicarme a la preparación de la fiesta.
Además coincidió con que el último fin de semana de Junio reabrieron el Camping Doñana, el camping donde veraneo desde que tenía 6 años y donde mi familia y yo actualmente tenemos un mobile home fijo.
No se si alguna vez os lo he contado, pero mi familia y yo llevamos unos 6 años fijos en ese camping y el año pasado, justo el 24 de Junio sufrimos uno de los incendios más grandes del año, el incendio de Doñana. Nuestro querido camping se quemó casi al 80% y lo perdimos todo. ¡Vaya noche pasamos sin saber que hacer!, pero por fín lo han reabierto y como no podía ser de otra forma, hemos vuelto a instalarnos. Ahora nos queda mucho trabajo por delante para preparar aquello para las vacaciones, por esta razón la primera semana no tuve tiempo para nada, pero me estoy organizando para que nos os perdáis ni una receta.
Bueno, con todo esto, me gustaría enseñaros las pastas de mantequilla con las que despedí a mis peques de la clase de 2-3 años:
Os presento a Popete, la mascota de la clase que nos ha acompañado durante todo este año y a la que tanto cariño le tenemos.
A los peques les encantaro, pero a mi me encantó mucho más ver sus caritas de ilusión al llevarse a su querido amigo a casa.
Os dejo por aquí la receta de las pastas de mantequilla y de la glasa con la que las he decorado.
¿Qué os parece?
Fuente: este post proviene de Mmm que Delicia, donde puedes consultar el contenido original.
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