Este mes empiezo una nueva aventura. Un reto que ayudara a más de uno en los preparativos de una fiesta infantil temática. Se trata del proyecto "Una galleta, un cuento" que organiza Patricia de Pattyscake. Cada mes un anfitrión elije un cuento clásico y todos los participantes deben de realizar su idea pensando en una fiesta infantil. Este mes Elena de Recetas con mimo propuso el fantástico cuento del Lobo y los tres cerditos. A mí me encanto ya que es uno de los favoritos de mis hijos. He optado por una receta salada, unos panecillos de leche para bocadillo ya que imaginaba que habría numerosas propuestas dulces. Además un sándwich/bocadillo viene de fábula para las meriendas infantiles. No es una idea original pero mis hijos se han vuelto locos realizando la receta así que por lo menos les han resultado atractivos y esto ya cumplía con lo que yo necesitaba. Os dejo con la receta
Ingredientes:
250ml de leche tibia
25g de levadura fresca
Una pizca de azúcar
2 huevos
50g de mantequilla a temperatura ambiente
600g de harina de fuerza (aproximadamente)
Una cucharita de sal
Para la masa "blanca"
Un poco de agua tibia
Sal (una pizca generosa
harina
Deshacemos la levadura en la leche con la pizca de azúcar. Añadimos la mantequilla y los dos huevo y batimos suavemente. A partir de aquí empezamos a amasar ya sea a mano o con ayuda de una amasadora. Mezclamos la sal con la harina, en mi caso ha sido aproximadamente unos 600g + la que he necesitado para bolear los panecillos (muy poquita). Hacemos una masa lisa y suave, espolvoreamos un poco de harina en un bol y la dejamos levar hasta que triplique su volumen. Una vez tengamos la masa lista le sacamos el aire y separamos raciones pequeñas. Las dejamos reposar unos minutos para que sean más manejables y entonces boleamos. Depositamos en papel de hornear aplastando ligeramente las bolas.
Hacemos la masa "blanca" deshaciendo la sal en el agua tibia (necesitaremos medio vasito) y añadimos la harina necesaria para conseguir una masa similar a la plastilina. Formamos las orejas, los ojos (la arte negra son unos granos de pimienta) y los morritos. Para pegarla a las bolitas humedecemos la parte que va a tocar la masa del pan. Para conseguir los agujeros en los morritos clavamos un par de palillos de madera que sacaremos una vez fríos los panecillos. Los panecillos ya decorados dejamos levar por segunda vez. Precalentamos el horno a 170º y horneamos hasta que estén hechos. Yo no los he pincelado con nada pero podéis usar una mezcla de yema, agua y un poco de aceite. No os aconsejo comer la parte mas blanca de los cerditos (ojitos, morritos y orejas) ya que tienen una función únicamente decorativa. Dejamos enfriar en una rejilla y rellenamos a gusto. En Facebook podréis encontrar mas cosas como siemprey también alguna foto del paso a paso de como hacer estos cerditos para bocadillo o hamburguesa, os espero.
Si queréis ver el resto de propuestas de mis compañeros pinchar en la siguiente imagen