Este pastel lo hice para un día muy especial. El día 25 de diciembre, Navidad.
Una semana en la que todos vamos un poco estresados con compras de última hora, comidas... y si como regalo nos llegan imprevistos de última hora (que este año también los hubo...) pues te podrás imaginar...
Me llevó 3 días de trabajo. Este tipo de pasteles es lo que tienen, requieren muuucha paciiieeencia y muuuuchas horas de decicación.
Tenía que elaborar un pastel pero sin previas premisas y sin conocer al cumpleañero, así que se estrechaban las pocas ideas... y es que este año no he tenido muchas ganas y pocas ideas...
Nada que ver con la idea que tenía en mente y eso fue una sobrecarga de estrés que ni te puedes imaginar...Hice una maqueta decorándola con la idea inicial pero no tuvo mucho éxito. A mí no me convencía...
Se la mostré a mi marido y a mi amiga Sandra y obtuve como respuesta... bueeeno..., ni fu, ni fa..., los colores parecen la bandera Italiana...y entonces.... ¿cómo la decoro, SooooCooooorrO?
Tras pasar largas horas pensando en cómo decorar el pastel, hice un voceto sobre papel (para que no se me olvidaran las ideas que me venían a la cabeza) y finalmente este fue el resultado.
Elegí este bizcocho como base:
(Elaboré 2 masas y este pastel lleva un bizcocho y medio de las cantidades que se indican en la receta)
Lo rellené de nata montada (crema de leche) con fresas confitadas e hice una cobertura de merengue suizo de chocolate. Era la primera vez que hacía este tipo de cobertura para pasteles y me pareció delicioSIIIIIIIÍsimo. Sin duda lo volveré a elegir como decoración de futuros pasteles.
Puse almíbar entre capas y cuando estaba durmiendo por la noche... (bueno en mente rumiativa...ya sabes...) me di cuenta que se me había olvidado poner mermelada de fresa entre las capas para darle más jugosidad ¡Dios! -pues ahora no puedo hacer nada- esa fue la pega que le pondría porque al ser un bizcocho muy grande tenía miedo que me quedara crudo (y fue todo lo contrario, para mi gusto quedó un pelín demasiado hecho)
Como yo no iba a asistir a la fiesta de cumpleaños no podría ver el corte del pastel y aunque les pedí una fotografía quizás se olvidaron de hacerla.
Al día siguiente recibí un whatsapp felicitándome. Sus palabras fueron ¡lujo de pastelazo, buenísimo! Delicioso! Nos ha encantado!
Al final ese es el mayor regalo cuando elaboras un pastel tan especial así que después del trabajo que me dio quería compartir contigo esta idea de decoración, por si algún día te animas.
La fotografía para evitar que se humedeciera la pegué sobre una base de fondant blanco a la que le di el toque de enmarcado con colorante en polvo dorado comestible.
También hice con fondant una especie de libro abierto donde pegué el mensaje de ¡Feliz cumpleaños! y como era para el día de Navidad el papel de azúcar llevaba impresas unas bolitas de Navidad para hacer un guiño a un día tan especial.
En la superficie del pastel puse bizcocho desmigado junto con unas fresas y Physalis peruviana bañadas en chocolate.
Muy sutilmente llevaba polvo dorado comestible por todo el pastel.
Otro día te explico cómo elaboré la cobertura de merengue suizo de chocolate.
Te deseo una bonita semana.
¡Por cierto! una vez más para comprar el papel de azúcar, fondant, caja para pastel...confié en marialunarillos
Estoy haciendo publicidad gratuita porque se merecen que les nombre. Son grandes profesionales, te aconsejan y responden a cualquier imprevisto. Seguiré confiando en ellos. Quería comentarlo.