Ingredientes: Molde de cristal de 26x16x5
4-5 patatas medianas,
1 cebolla grande,
150gr de bacón,
3 huevos,
150gr de queso rallado,
sal,
pizca de nuez moscada,
aceite para untar el molde,
200gr de nata (crema de leche) de cocinar
Precalentar el horno a 180º con calor arriba y abajo, sin ventilador.
Pelar y cortar las patatas en rodajas muy finas, yo he usado una mandolina.
Cortar la cebolla en juliana fina y el bacón en tiritas.
Poner en un bol los huevos y batir un poco, añadir la nata (crema de leche), salpimentar y agregar una pizca de nuez moscada, mezclar bien con barillas.
Untar el molde con un poco de aceite por todos los huecos.
Colocamos dos capas de patatas bien distribuidas. Entre capa y capa echar un poco de sal por encima.
Repartir la mitad de cebolla y del bacón,y un poco de queso rallado,con un cazo regar por encima con un poco de mezcla de huevo y nata (crema de leche).
Repetir la misma operación una vez más, sin olvidar echar un poco de sal a las patatas.Terminar con una capa de patatas y por encima el queso restante y lo que quede de los huevos con nata (crema de leche).
Tapar con papel de aluminio. Meter en el horno a 180º durante 45 minutos,con calor arriba y abajo sin ventilador, ponemos la fuente en la parte mas abajo del horno. Pasado este tiempo la sacamos y le quitamos el aluminio y lo volvemos a meter al horno durante 25 minutos más, o hasta que pinchemos con un palillo y salga limpio y el palillo traspase el pastel con facilidad.
Dejar templar y servir.
Un consejo: para que las cebollas esten más tiernas en el pastel sofreirlas un poco.