Probamos las cápsulas Emocup – recargables Dolce Gusto

¿Quieres saber cómo se usan las cápsulas recargables Dolce Gusto? ¿Las has visto en anuncios y tiendas pero no estás seguros de cómo funcionan? ¿Sirven para tu cafetera? ¿Tienen algún riesgo? ¿Son fáciles de usar las cápsulas recargables? ¿Quieres comprarlas pero te frenan las dudas? Pues bien, a todas esas preguntas, y muchas más, vamos a dar respuesta en el presente artículo.

Nos hemos hecho con un paquete de cápsulas recargables Dolce Gusto, de la marca Emocup, y hemos preparado café con ellas para poder explicarte al detalle cómo es el proceso.

En primer lugar, vamos a echar un vistazo a las cápsulas recargables Emocup, tal como nos las encontramos en el paquete de 3 unidades, para saber qué pinta tienen:



Las cápsulas de Emocup cuestan alrededor de 20 euros, y como ya hemos dicho en cada comprar vienen 3 cápsulas. Cada una de ellas, según el fabricante, puede durar unos 50 usos, en función de lo que aguante la silicona que hace de tapadera.

Aunque ya hemos hablado de ellas en nuestra web (ver artículo sobre las cápsulas recargables Dolce Gusto), en esta ocasión las podido probar de primera mano y te vamos a contar, con pelos y señales, cómo ha sido la experiencia y cuáles son en nuestra humilde opinión los puntos fuertes y débiles del producto. Comenzamos:

Primer paso: perforar la cápsula

El primer paso, cuando vayas a estrenar una cápsula recargable nueva, será siempre punzarla. Esto significa que realizaremos un agujero en el lugar exacto para asegurarnos de que la cafetera, en posteriores usos, siempre va a insertar su inyector por el mismo sitio. Si no lo hiciéramos así… al cabo de algunos usos la cápsula parecería un colador y el agua se escaparía por todos los sitios. Desastre a la vista

Recuerda que este paso solo tendrás que hacerlo una vez (antes del primer uso de tu cápsula), ya que el agujero que practiques será el mismo durante toda la vida útil de la cafetera.

Realmente la perforación se puede hacer de forma manual, pero es mucho más preciso y seguro dejar que sea nuestra propia cafetera quien se encargue del trabajo.

Tenemos que seguir de manera fiel las instrucciones que encontramos dentro del paquete de cápsulas Emocup. En ellas se nos indica que debemos situar nuestra cápsula recargable en el dispensador de cápsulas de nuestra Dolce Gusto, siempre en la misma posición. Como referencia, la cápsula recargable tiene una pequeña pestaña de silicona que deberá estar siempre apuntando hacia el exterior.

El agujero debe quedar hecho muy cerca de dicha pestaña, como puedes ver en la siguiente imagen:

Cápsulas recargables Emocup - pestaña


Si miramos la tapadera de silicona roja por debajo, vemos que tiene una letra E (de Emocup) silueteada, y una pequeña hendidura justo en el lugar donde debe quedar hecho el agujero. Te lo mostramos:

Emocup_tapadera_por_debajo


Para hacer el agujero, coloca la cápsula en la cafetera -recuerda, la pestaña siempre mirando hacia el exterior- y baja la palanca como si fueras a preparar café.

La primera vez tendrás que apretar un poco, porque la silicona es algo más dura y resistente que la tapa de aluminio que normalmente traen las cápsulas estándar. Así es como debe estar situada la cápsula recargable antes de meterla en tu cafetera:

Cápsula Emocup en el dispensador


Si quieres comprobar que el agujero lo has hecho bien y la cápsula funciona como debe, puedes poner en marcha tu cafetera y comprobar que el agua sale correctamente. ¡Recuerda colocar un vaso debajo de la boquilla antes!

Una vez hecho el agujero, tendrás la cápsula lista para usar todas las veces que quieras. Recuerda que, según el fabricante, cada una de las cápsulas recargables Dolce Gusto está preparada para unos 50 usos.

Segundo paso: rellenar la cápsula

Una vez perforada la cápsula, nos ponemos manos a la obra. Simplemente tenemos que rellenarla de café, ponerla en la cafetera en la misma posición que antes (para que el inyector de la Dolce Gusto siempre perfore en el hueco de nuestro agujero) y establecer  la configuración de café que más nos guste: agua caliente, fría, más o menos cantidad de agua, etcétera.

La forma correcta de hacerlo es la siguiente:

Coloca el filtro metálico de la cápsula en su posición correcta; esto es, en el fondo de la cápsula y con la parte convexa hacia abajo. Puedes verlo en una de las fotografías anteriores de este mismo artículo.
A continuación, echa la mezcla de café molido que prefieras. La cantidad viene determinada por un borde dibujado en el interior de la cápsula, que es justo donde encaja el cierre de plástico blanco que sirve para mantener el café en su sitio.
En tercer lugar, pon el cierre -una pequeña pieza de plástico, redonda y con agujeros- encima del café y cubre toda la cápsula con la tapadera original de silicona roja.
Este es el aspecto que debe tener tu cápsula llena de café antes de poner el cierre de plástico y cerrarla con la tapa de silicona. La cantidad de café que se ve en la fotografía corresponde al nivel máximo dibujado en el interior de la cápsula recargable:

Cápsula Emocup llena de café


Por último, ponemos encima el cierre de plástico, cerramos la cápsula, y la situamos en nuestra cafetera igual que hicimos en el primer paso (el de la perforación inicial).

Ponemos el cierre de plástico sobre la cápsula Emocup


Para asegurarte de que todo va a ir bien, comprueba siempre que el agujero de salida de la cápsula coincide con el agujero del dispensador:

Cápsula Emocup en dispensador: vista desde abajo


¡Y listo!

Ya puedes poner en marcha tu cafetera y saborear tu café favorito. Las primeras veces es normal que te cueste dar con el punto exacto: cantidad de café, prensado, configuración de la cafetera… piensa que las cápsulas oficiales están ya predeterminadas con una dosis concreta que siempre es la misma, y el resultado también lo es. Usando cápsulas recargables, el proceso es más manual y necesita de cierta práctica.

Para finalizar nuestro reportaje, te adjuntamos un vídeo donde puedes ver cómo funciona la extracción de café una vez que hemos rellenado nuestra cápsula. La cerramos, la colocamos en la cafetera, la ponemos en marcha… y esto es lo que ocurre:



Tercer paso: limpieza

Después de haber usado tu cápsula Emocup, debes enjuagarla y secarla bien para eliminar todos los posos y restos de café molido. Una cápsula convencional, de un solo uso, va directamente a la basura, pero recuerda que tu cápsula recargable la vas a emplear varias decenas de veces. Por suerte su limpieza es muy sencilla, ya que con pasarla bajo el agua es más que suficiente.

Conclusiones

En nuestra opinión, las cápsulas recargables Dolce Gusto de Emocup funcionan exactamente como se espera de ellas. De la calidad del café no vamos a hablar, porque eso depende de la materia prima que uses y de tu habilidad para combinar cantidades, prensados, y nivel de agua en la cafetera. Como es lógico, el producto tiene una leve curva de aprendizaje que debemos superar antes de sacarle todo el partido.

Tampoco hemos podido comprobar su durabilidad (alrededor de 50 usos, según el fabricante)… quizá dentro de algunas semanas podamos ofrecerte datos más precisos a este respecto

Nos ha gustado especialmente la facilidad para limpiarlas y su sencillo mantenimiento. Un buen enjuague, y listo.

Lo que menos nos ha gustado ha sido el folleto de instrucciones, muy corto y sin apenas explicaciones -solo dibujos-… aunque por suerte para completar esa información nosotros te hemos preparado algunos consejos adicionales

Cápsula recargable Emocup: vista interior


Trucos y consejos finales

Aquí te dejamos algunos consejos y anotaciones que hemos realizado mientras probábamos estas cápsulas recargables de Dolce Gusto. No figuran en el libro de instrucciones del producto, pero nos parecen muy útiles y seguro que a más de uno le sirven de ayuda:

La primera vez que perforas la cápsula, el agujero apenas es un puntito sin volumen. Ayúdate de un objeto punzante, algo más grueso que un alfiler, para hacerlo más grande y permitir que el inyector lo atraviese cómodamente en sucesivos usos sin tener que forzar la palanca de la cafetera. En cualquier caso, a medida que acumules usos en tu cápsula recargable, el agujero irá dándose de sí y cogiendo más holgura.
Haz una pequeña marca en el contenedor de cápsulas de tu cafetera para que sepas exactamente dónde debe coincidir tu cápsula Emocup. Es fundamental que siempre la coloques en la misma posición que cuando la perforaste por primera vez.
Con el tiempo irás aprendiendo las proporciones de café y el prensado que debes aplicar según tus gustos. Al principio te recomendamos que llenes la cápsula por completo, y utilices una longitud similar a la que usas con tus espressos (recuerda que vas a preparar café solo). Esto es: 1  o 2 niveles en el Play&Select, si tu cafetera Dolce Gusto es automática. Si usas más agua, en nuestra opinión el café resulta demasiado ligero. Recuerda que si quieres hacer un cortado o un café con leche, deberás agregarle la leche a posteriori.
Como habrás podido observar en el vídeo, es muy importante que selles bien el cierre -la tapadera de silicona- para evitar fugas de agua antes de situar la cápsula recargable en la cafetera.
Te recomendamos enjuagar y limpiar bien los restos de café de tu cápsula recargable Dolce Gusto justo después de haberla usado. Si la dejas sin limpiar y la intentas lavar más adelante, los restos de café estarán más secos y te costará más trabajo eliminarlos.
Las cápsulas recargables de Emocup tienen dos piezas sueltas: el filtro metálico del fondo, y el cierre de plástico de color blanco. Te aconsejamos que siempre guardes tu cápsula bien cerrada y con estos dos elementos dentro, para evitar perderlos.
Fuente: este post proviene de Comprar mi Cafetera, donde puedes consultar el contenido original.
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