Los chipirones son una cosa que me vuelve loca y si no los como más, es por el tema de tener que limpiarlos. Chipirones, puntillas o calamar, que me da un poco todo igual porque se limpian igual aunque varié el tamaño. Las puntillas se complican porque son las más pequeñas y llevan mucho más trabajo.
Me gustan porque a la plancha se hacen en segundos y se les puede acompañar con cualquier cosa sin temor a que no funcionen.
En esta receta, utilicé unos brotes de lechugas variadas de estos que venden en bolsas ya preparadas, donde encontramos, espinacas, escarola, lechugas, rúcula...que pasé por la plancha con una gota de aceite durante 10 segundos retirándolos a parte, agregando los champiñones a continuación hasta que se pocharon ligeremente, y por último, los chipirones vuelta y vuelta con ajo molido, sal y perejil picado
¿Puede existir realmente algo mejor?