Salsa de pesto casera con anacardos
La salsa de pesto tradicional, es originaria de Génova, ciudad italiana vinculada al mar. Se cree que ésta salsa es una variación de la “agliata”, una salsa que utilizaban los pescadores para conservar los alimentos.
Pesto viene de “pestare” término que, en italiano, significa machacar en un mortero por lo que ésta era la forma correcta de elaborar la salsa de pesto tradicional. Tan sencillo como introducir los ingredientes en un mortero e ir machacando hasta obtener la textura deseada. ¿Sencillo, verdad?
La salsa de pesto original se elabora con piñones, albahaca, parmesano, ajo, aceite de oliva y sal. A mi me gusta variar los frutos secos, por lo que también la hago con nueces, avellanas o anacardos. Me queda probarla con pistachos. ¡Pronto!
Nuestra deliciosa salsa no sólo es perfecta para acompañar a un buen plato de pasta. Marida estupendamente en ensalada, con carne y también con pescado. Por ejemplo si mezclamos un poco de pesto con pan rallado, lo ponemos encima de un lomo de salmón y lo horneamos tendremos un plato exquisito. Y qué te parece en una pizza como ésta?
Uno de los secretos de una buena salsa de pesto es el aceite que utilicemos. En ésta ocasión he utilizado el AOVE primeras aceitunas de Naturvie, un aceite que da sabor y personalidad a mi salsa de pesto casera con anacardos.
¿Te parece que nos pongamos el delantal y nos vayamos a la cocina a preparar esta deliciosa salsa?
Fotografía de Gourmet Bilbao.
Fuente: este post proviene de Gourmet Bilbao, donde puedes consultar el contenido original.
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