Pero él, muy astuto…
en rosa blanca se convirtió
y con grandes espinas se defendió…
Los años trajeron más recuerdos
más cartas escondidas en el cajón,
fotos que se habían perdido
en el rincón del armario de las dos…
Los años hacen que al mirarte
las lágrimas se escondan
avergonzadas por no poder calmar
la tristeza que hay en mi corazón…
Abril… y las mañanas que
se convierten en noche
y el sol que lucha por salir
y hacer brillar mi rostro…
El brillo que abril apagó.
Grito con fuerza nuestra canción
cuando te extraño…
Pero nadie lo sabe , solo vos y yo.
Los ovillos quedaron enredados y cada
año en abril suelo agarrar uno
y desenredar apenas unos hilos…
Para que no se acabe , para que sea eterno
recordarte mientras mis manos juegan
y tu sonrisa se pinta en el aire
que se atreve y me trae tu perfume
por un momento… por un instante.
Los años no pueden evitar
que abril sea gris
por eso florece más la rosa blanca…
y sus espinas no dejan que nadie
quiera robar su dolor…