Las LTPs se encuentran en frutas como el melocotón, albaricoque, cerezas, ciruela, naranja, verduras (principalmente de hoja), polen y látex (savia de la planta).
La LTP del melocotón, identificada como Pru p 3, presenta una elevado grado de similitud estructural con otras LTPs, lo que provoca reactividad cruzada al consumir otras frutas, principalmente del género de las Rosaceas (el cuerpo las confunde, generando episodios de alergia frente a alimentos a los que realmente no es alérgico).
Resistentes al tratamiento térmico, pueden permanecer en alimentos cocinados provocando graves episodios de alergia a consumidores potencialmente sensibles. La reacción alérgica se produce cuando las llamadas células presentadoras de antígenos del intestino reconocen estas proteínas.
La digestión de las mismas origina fragmentos (péptidos), que son presentados a los linfocitos T, responsables de identificarlos y procesarlos en función de su origen interno o externo, así como de desarrollar una respuesta adecuada. En caso de ser identificados como sustancias “extrañas”, los linfocitos T activan a los linfocitos B (productores de anticuerpos), que desencadenan la síntesis de Inmunoglobulina E (IgE) frente al alérgeno, produciendo los síntomas habituales de una crisis alérgica (prurito, conjuntivitis, rinitis, etc.).
Los alérgicos al melocotón presentan frecuentemente reaccioneslocales (habitualmente lo son también al polen), como urticaria por contacto con la piel (manos y cara) y síndrome de alergia oral (hinchazón en labios y lengua). Asma, rinitis y conjuntivitis son síntomas clásicos asociados también al contacto con la piel de la fruta.
La sintomatología en pacientes que sufren reacciones generales (habitualmente no alérgicos al polen pero sí a la pulpa de la fruta), manifiestan 1 hora tras la ingesta, un cuadro sintomático que puede ser moderado (urticaria generalizada y picor intenso, acompañada de dolor abdominal, vómitos y diarrea) o grave en el caso de elevada sensibilización (edema de glotis, anafilaxia y shock).