Septiembre es el mes en que todo empieza de nuevo y eso me encanta.
Ademas este año, con el cambio de cole de los peques, es casi como un cambio de ciclo.
Este año los pobres no comerán en casa, por un lado me da mucha pena, pero por el otro doy palmas y volteretas hacia atrás tocando las castañuelas, que algo tengo de @malamadre.
Así que este nuevo curso voy a tener mas TIEMPO, si si,eso tan escaso que le vamos robando todos al sueño (bueno, yo lo intento, pero debo de tener ADN de marmota porque no lo suelo conseguir, será quizás que aún arrastro sueño de los dos años que me pasé sin pegar ojo)
TIEMPO para el blog y el proyecto que va en paralelo, que tengo medio embastado y no ha habido manera de avanzarlo.
TIEMPO para aprender.
TIEMPO para cuidarme, porque forma parte de ese “renacer” que me pide el cuerpo (nunca mejor dicho)
TIEMPO para tener la casa al día (eso lo pongo por si el informático ordenado que vive conmigo lo lee, que no suele, pero no vaya a ser…) ;)
Y después de todo este tiempo, aún tener mucho TIEMPO para ir al parque, leer cuentos, hacer deberes y para dar mil achuchones y millones de besos.
¿Y vosotros que planes tenéis para el nuevo curso?
Hasta el 8 de septiembre que los peques no empiecen el cole, estaremos aún a 1/4 de gas o menos, pero luego ya vamos a poner los motores a tope.
Un abrazo
Maite