Es muy sencillo de preparar, aunque es un poco lento por que hay que montar claras y luego montar la nata (crema de leche), a lo que hay que añadir las 2,5 horas de cocción en la olla lenta, pero os aseguro que el resultado merece la pena.
Vamos a por la receta.
Ingredientes:
6 Claras
200 ml. de Nata (crema de leche) para montar
250 gr. de Harina de trigo
200 gr. de Azúcar
Gasificante (1 sobre blanco y 1 sobre morado)
Una pizca de sal
1 c/c de Esencia de vainilla
1 c/s de Zumo de limón
Forramos la olla con papel de hornear, la encendemos y precalentamos en alta.
Mezclamos la harina con el gasificante y reservamos.
En un bol comenzamos a montar las claras, cuando empiecen a espumear, añadimos la pizca de sal y seguimos montando.
Una vez empiecen a montarse, vamos añadiendo poco a poco la mitad del azúcar (100gr), la esencia de vainilla y el zumo de limón, seguimos montando, hasta que se formen picos.
Vamos añadiendo la mezcla de harina y gasificante poco a poco, con la varillas, veremos que va perdiendo el aire un poco. Una vez integrada la harina reservamos.
En un recipiente frío comenzamos a montar la nata (crema de leche), que también tiene que estar muy fría, y le vamos añadiendo poco a poco el resto de azúcar (100 gr) sin dejar de montar.
Una vez montada la nata (crema de leche), la vamos añadiendo poco a poco y con movimientos envolventes a la mezcla anterior.
Pasamos la mezcla a la olla, espolvoreamos un poco de azúcar y cocinamos en alta 2.5 horas. A las 2 horas comprobamos con un palillo si ya está listo el bizcocho, pues cada olla es un mundo.
Retiramos el bizcocho de la olla y dejamos enfriar sobre una rejilla. Es muy importante no dejar el bizcocho dentro, puesto que si no...seguiría cocinándose y quedaría muy duro.
Ya tenemos listo nuestro bizcocho. La verdad es que a mí los bizcochos preparados en olla lenta me encantan, los veo más ligeros que cuando lo hago en el horno.