Cuando Marga del blog Azafranes y Canelas organizó el reto #Asaltablogs seguro que no se imaginaba la que estaba liando.
Porque durante un mes, un grupo de blogueros nos dedicamos a asaltar el blog elegido para "robar" una receta y versionarla. En el blog de Marga tenéis todos los detalles del juego.
El caso es que este mes le ha tocado a María de Los Blogs de María, un lugar donde es difícil elegir una sola receta pues todas son deliciosas.
Yo anduve paseándome un par de semanas hasta acabar decidiéndome por este Bizcocho rayado que tenía una pinta increíble.
María advertía de su laboriosidad. porque no es difícil, pero si entretenido, ya que no se hornea como estamos acostumbrados de una sola vez, sino que cada "raya" es una delgada capa que se hornea de manera individual por un periodo de tiempo muy breve, por lo que hay que estar muy pendiente.
Pero el resultado es espectacular, el corte de este bizcocho haciendo rayas horizontales es digno de ver.
INGREDIENTES:
Para el bizcocho:
6 huevos (tamaño L)
250 gr de mantequilla a temperatura ambiente
250 gr de azúcar
150 gr de harina de trigo
100 gr de harina de maiz (maicena)
1 cucharada de vainilla líquida
4 cucharadas soperas de cacao puro en polvo
Para la cobertura:
200 gr de chocolate de postres
200 gr de nata (crema de leche) para montar
1 cucharada de mantequilla
PREPARACIÓN:
Comenzamos separando las claras de las yemas. Ponemos la mariposa en el vaso de la thermomix y montamos las claras 4 minutos a velocidad 4. Las reservamos aparte.
Ahora sin lavar el vaso vamos a batir la mantequilla con el azúcar 2 minutos a velocidad 5.
Ahora ponemos la máquina en marcha a velocidad 3 y vamos añadiendo las yemas una a una batiendo bien antes de echar la siguiente.
A continuación tamizamos la harina de trigo y la maicena y la añadimos al vaso, Mezclamos bien un minuto a velocidad 3 1/2.
Sacamos la masa y la ponemos en un recipiente amplio. Agregamos poco a poco las claras montadas y vamos mezclando hasta integrarlo todo bien.
Separamos las masas en dos recipientes, la misma cantidad en ambos. A uno le ponemos a vainilla liquida y al otro el cacao. Mezclamos.
Ahora viene lo mas entretenido. Precalentamos el horno solo el grill, a 200º.
Ponemos un papel de horno en la base de un molde desmoldable de 20 cm. No conviene que sea más grande pues nos quedaría muy bajito.
Tendremos preparadas las dos masas con dos cucharas soperas para servir cada capa y no perder mucho tiempo. Ahora veréis porqué.
Ponemos tres cucharadas soperas de masa de vainilla en el molde. Damos unas vueltas al molde para que la masa se extienda por todo el fondo, como si fuera un crêpe. Horneamos 3 minutos, hasta que veamos que se ha cocido sin dorarse en exceso.
Sacamos el molde, sin apagar el horno y echamos tres cucharadas de masa de cacao encima de la masa que habíamos cocido. Con un paño damos vueltas al molde para que se extienda la masa por todos lados y volvemos a hornear otros 3 minutos. Así iremos haciendo hasta acabar toda la masa de vainilla y de cacao. Al ir alternando las capas, despues nos dará la sensación de rayado.
A medida que vais añadiend capas, podeis notar que no hace falta que se horneen durante tres minutos completos, a veces con dos minutos y medio ya se nota cocida. No queremos que se hagan mucho. Yo tocaba la masa cocida con un dedo, suavemente, y debía estar firme pero no dura.
Esto es lo más entretenido de todo, ya que no podemos despegarnos del horno para que las capas no se cuezan mucho.
Al acabar de hornear la última capa, sacamos el molde con cuidado del horno y lo dejamos en una rejilla una media hora.
Desmoldamos con cuidado y podemos hacer la cobertura ahora o dejarlo reposar y hacerla cuando esté completamente frío. Yo hice el bizcocho un viernes por la tarde/noche y dejé que se enfriara por completo e hice la cobertura al dia siguiente por la mañana.
Bueno la cobertura va así.
Rallamos el chocolate en la thermomix, diez segundos a velocidad 5-10. Agregamos la nata (crema de leche) y la mantequilla y derretimos 4 minutos, 37º y velocidad 2.
Una vez derretida la vamos a verter sobre el bizcocho dejando que resbale por todos lados.
Yo en este tipo de casos, pongo un vaso o un cuenco dentro de un plato hondo. Coloco el bizcocho encima y cubro con la cobertura, así no se mancha casi nada y se recoge todo el chocolate que va cayendo.
Ya solo quedaría adornar con lo que queramos, fideitos de chocolate, bolitas de cereales, sprinkles, etc.. Dejamos que repose en la nevera un rato antes de servirla para que la cobertura se seque bien.
SIN THERMOMIX:
Con una batidora eléctrica vamos a montar las claras y las reservamos aparte. Seguimos con la batidora y montamos también la mantequilla con el azúcar hasta que doble su tamaño. Ahora vamos echando las yemas una a una sin dejar de batir.
Añadimos las dos clases de harina y batimos hasta tener una masa suave y homogénea. Las mezclamos con las claras con movimientos envolventes. Dividimos la masa en dos partes iguales, a una le agregamos la vainilla y a la otra el cacao. Mezclamos bien las dos y procedemos a hornear tal y como os explico mas arriba.
Ponemos la mariposa y montamos las claras.
Ya están montadas, las reservamos.
Montamos la mantequilla con el azúcar.
Nos va a quedar una crema.
Con la máquina en marcha vamos echando las yemas una a una.
Y agregamos las dos clases de harinas, tamizadas.
A esta masa le agregamos las claras y las mezclamos bien.
Las dividimos en dos partes, a una le ponemos vainilla y a otra cacao en polvo.
Y empezamos el proceso, ponemos dos o tres cucharadas de masa de vainilla en el molde. Lo giramos hasta que cubra todo el fondo. Y horneamos unos dos o tres minutos.
Y encima de esa masa, echamos dos o tres cucharadas de masa de cacao. Volvemos a girar el molde para que se extienda la masa por toda la superficie (cuidado que quema). Volvemos a hornear dos o tres minutos.
Vamos alternando las capas de masa de vainilla y de cacao hasta acabar. Dejamos dentro del molde hasta que lo vayamos a desamoldar.
Antes de servirlo, unas horas mejor, hacemos la cobertura. Primero se pulveriza el chocolate.
Añadimos la nata (crema de leche) y la mantequilla y calentamos hasta fundirlo todo.
Ahora damos la vuelta al bizcocho para que nos quede la parte mas plana hacia arriba. Lo ponemos sobre un vaso y en un plato para que caiga la cobertura.
Vamos a ir echando la cobertura para que lo cubra todo. Dejamos reposar en la nevera.
Y antes de servir decoramos a nuestro gusto.
El corte es muy bonito y el sabor exquisito.