Pensar en este cuento es imaginar una cama llena de colchones con un guisante, y durmiendo (o intentando dormir) está nuestra princesa.
En una fiesta de esta temática tendría que haber princesas y guisantes, los colores podrían ser rosa y verde, y un buen bocadito salado serían estos tripletes con guisante y corona incorporados.
Sólo el verlos, te evocan el cuento con un sinfín de capas de colores simulando los colchones y el guisante que incomoda el sueño de nuestra princesa.
Está claro que los rellenos pueden ser del gusto de cada uno, yo he optado por uno que nos encanta en casa, la combinación de queso crema y salmón, pero el que sin lugar a dudas triunfa entre los niños es la combinación de queso y jamón, un dúo infalible.
INGREDIENTES
-pan de molde sin corteza
-salmón ahumado
-philadelphia
-huevo duro
-guisantes cocidos
Con un rodillo, estiramos las rebanadas de pan de molde
Cogemos una rebanada, la untamos con philadelphia y le ponemos una loncha de salmón ahumado. Encima ponemos otra rebanada de pan de molde untada con una fina capa de philadpelhia y le ponemos huevo duro cortado en láminas.
Volvemos a poner una rebanada untada con philadelphia y una loncha de salmón ahumado y finalmente lo tapamos con otra rebanada de pan.
Envolvemos con papel film cada paquetito y lo metemos en la nevera un par de horas para que quede compacto.
Después lo sacaremos y lo cortaremos de tal manera que nos queden 6 bocaditos (lo partimos por la mitad, y cada mitad la partimos en tres trozos).
En cada triplete, introduciremos un guisante cocido en una de las capas y lo remataremos con un topper de corona hecha con cartulina de purpurina rosa.
Unos bocaditos que serán la delicia de nuestras princesas.
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Un beso