Casi todos los años por estas fechas, un familiar me regala membrillos. Esta fruta, al menos yo, no me la puedo comer cruda, pero sí que se pueden hacer ricos postres con ella. El año pasado la puse en compota (ver receta aqui), y este año me he decidido por hacer carne de membrillo. Es muy fácil de hacer y está riquísima.
Ingredientes:
- 1 Kg de membrillo ya limpio y sin partes duras
- 1 Kg de azúcar
- 1 limón
Lavamos y limpiamos bien los membrillos debajo del grifo del agua fría.
Troceamos los membrillo quitándoles la parte dura y todas las partes feas que tengan.
En la olla exprés echamos el zumo del limón y encima el membrillo troceado y el azúcar.
Los ponemos al fuego lento hasta que todo el azúcar se haya diluido y parezca un almíbar clarito.
Tapamos la olla y la ponemos a cocer durante 5 minutos desde el momento que empiece a rotar la válvula.
Destapamos la olla (cuando haya pasado el tiempo reglamentario) y trituramos todo con la batidora.
Lo ponemos de nuevo al fuego (destapada) y dejamos que reduzca, dándole vueltas muy a menudo hasta que veamos que la masa se va despegando de las paredes. Ese es el momento de quitarla del fuego y ponerlo en moldes para dejarlo enfriar.
En el frigorífico y bien tapado puede durar varios meses. Con un poco de queso fresco está delicioso.