En casa es un clásico utilizar cruasanes en forma de bocadillo, en esta ocasión hemos aprovechado para consumir los restos de un blíster de cecina que andaba dando vueltas por la nevera, sobre una base de hojas de lechuga roja, unas tartaletas y unas banderillas de queso fresco con pepinillos y tomates cherris en almíbar.
La cecina son los cuartos traseros de la vaca curados, como si de jamón de cerdo se tratara, pero al ser de vaca tienen menos grasa.
Receta de tomates cherris en almíbar:
https://jorbasmar.blogspot.com/2021/10/tomates-cherrys-en-almibar.html
Ingredientes (2 personas):
2 cruasanes
1 quesito fresco
8 rodajitas de chorizo de herradura
8 rodajas de pepinillos en vinagre
8 tomatitos cherris en almíbar
Guacamole
1 tomate
Aceite de oliva
Sal
Preparación (15 minutos):
Nada más sencillo que la realización de este tipo de cenas, además admiten fácilmente las variaciones que los restos de vuestra nevera os permita.
Comenzamos preparando lo más difícil de la cena, colocamos un tomate lavado y troceado en el vaso de la batidora, le añadimos sal y aceite al gusto y trituramos.
Untamos la parte interior de ambos cruasanes con esta mezcla.
Esparcimos unas hojitas de lechuga por el fondo del plato donde serviremos nuestros cruasanes.
Colocamos la cecina en el interior de los cruasanes, los partimos por la mitad, para comerlos con mayor facilidad y colocamos dos mitades de cruasán en el centro de cada plato.
Llenamos las tartaletas con salsa guacamole y cubrimos el guacamoles con una rodajita de chorizo.
Con ayuda de un palillo preparamos las banderillas uniendo una rodajita de pepinillo en vinagre, un dadito de queso fresco y un tomate cherri en almíbar.
Cena de lujo, fácil, rápida y perfecta para consumir restos de la nevera.