Y aqui os va mi versión, espero que sea de vuestro agrado.
Ingredientes
2 kilos de almejas,dependiendo del tamaño y lo fresco que esten quizás habrá que comprar más, hay quien usa almejas “baby” de lata, pero como siempre prefiero utilizar productos naturales y frescos.
2 porros
1 chalote
2 dientes de ajo
1 cucharadita de pimentón de La Vera
Perejil
1 vaso de vino blanco
1 copa de brandy
250 dl. de crema de leche
Aceite de oliva
Sal Marina
Pimienta negra (molida al instante)
Pan rústico tostado
Preparación de la crema de almejas:
Colocamos las almejas en un recipiente amplio y llenamos de agua, dos puñados de sal marina, las movemos para que se vayan limpiando y dejamos que vayan abriéndose y soltando las impurezas, cambiando agua cada media hora y repitiendo la operación hasta que están abiertas aunque sea un poco, justo para permitirnos lavarlas bajo el agua del grifo y quitar los últimos granitos de arena.
Cuando las almejas estén listas vamos a sofreír en aceite de oliva un chalote cortado en aros, dos dientes de ajo troceados, una cucharadita de pimentón picante y unas hojas de perejil picado en una sartén de parades altas, o sea, un wok, o algo parecido al wok, antes de que se queme el sofrito añadimos las almejas, salpimentamos, echamos un vaso de vino blanco mezclamos y dejamos cocinar hasta que estén totalmente abiertas, evitando que se reduzcan mucho, antes de sacarlas flamear con una copa de brandy, para eso tenemos que mezclar continuamente controlando la apertura y el tamaño, una vez cocidas vamos a quitarles las valvas, separando una docena con valvas para adornar.
En un robot de cocina o lo que tengáis a disposición para triturar vamos a colocar las almejas, los porros y tres vasos del agua de los porros, y convertimos todo en una crema, luego colocamos dicha crema en una cacerola, calentamos y añadimos 250 dl. de crema de leche, ajustamos de sal y pimienta y llevamos a hervir, cocinamos unos diez minutos y estamos listos para servir la crema de almejas en un pequeño bowl o plato hondo, colocando 3 almejas con valva en el centro del plato, una rociada de perejil picado y unas rebanadas de pan tostado frotado con ajo.
Ya tenemos lista la crema de almejas para el placer absoluto de los comensales, aconsejo un fresco Pinot Grigio o un buen vino de Rueda para saborear el plato.