Receta para hacer arroz caldoso con pollo
Hoy os traemos una receta en la que destacan, como principales ingredientes, el arroz y el pollo. La denominación de caldoso le viene dada porque se prepara con una proporción de agua que da lugar, tras la cocción del plato, a un caldo. En el extremo opuesto a esta elaboración están los arroces secos, como es el caso de la paella tradicional, en la que el caldo se agota al evaporarse una parte y ser otra absorbida por el grano.
El arroz caldoso es un plato tradicional de la zona del levante español, con especial presencia en la gastronomía de las huertas murciana y valenciana. En otras regiones de España se estilan también otras versiones de arroz caldoso, entre las que destacan los guisos elaborados con pescado y marisco que durante décadas se han preparado en zonas costeras de Galicia o Cataluña.
La preparación de este plato es muy sencilla y agradecida, ya que con unos pocos ingredientes se obtiene un increíble sabor. Para la receta de hoy hemos elegido pollo. Además, para potenciar notablemente el plato, hemos empleado un caldo de pollo hecho en casa. Os animamos a hacerlo, porque sin duda se obtiene un fondo estupendo para cualquier plato de carne, muy superior al caldo que podéis conseguir en cualquier establecimiento.
Partiendo del fundamento de esta receta, podéis preparar otros deliciosos arroces, simplemente sustituyendo el caldo de pollo por un caldo de pescado, y la carne por un poco de pescado y marisco, conseguiréis otros ricos guisos. ¡Animaos y experimentad!
Vídeo de la Receta
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Ingredientes [Para 2-3 personas]:
Elaboración de la Receta
En primer lugar, limpiamos de restos de plumas los muslos de pollo, para ello podemos hacer uso de un soplete de cocina. Lo aplicamos ligeramente sobre las partes del muslo que presenten plumas. Si hay poca cantidad, podemos retirarlas a mano ayudándonos de unas pinzas.
Ponemos a calentar aceite de oliva en una sartén. Añadimos los muslos de pollo y los cocinamos por todos lados hasta que se doren un poco. Retiramos de la sartén y reservamos.
Pelamos las zanahorias y las cortamos en trozos pequeños.
Quitamos las raíces al puerro y, si fuese necesario, la capa más externa que es la que suele presentar restos de tierra y suciedad. Picamos el puerro finamente.
Añadimos ambos ingredientes a la misma sartén donde hemos cocinado la carne. Si fuese necesario, volvemos a engrasarla. Cocinamos, a fuego medio, hasta que el puerro se ablande.
Vertemos el caldo de pollo en una olla y lo ponemos a calentar, de este modo lo podremos incorporar caliente a la sartén.
A continuación, echamos en la sartén el tomate frito y la pulpa de pimiento choricero. Mezclamos.
Seguidamente, incorporamos la pimienta negra molida, la sal y el curry. Mezclamos.
Volvemos a poner los muslos de pollo dentro de la sartén.
Añadimos un poco de caldo. Cocinamos durante 5 minutos, a fuego medio, para que los sabores se integren y el pollo se impregne de ellos.
Pasados los 5 minutos, incorporamos al guiso el arroz y mezclamos para que se reparta de manera uniforme.
Finalmente, vertemos el caldo bien caliente. Cocinamos, a fuego medio, durante 15 ó 20 minutos o hasta que el arroz esté cocido.
Retiramos de la sartén, dejamos reposar durante 10 minutos y servimos.
Anotaciones y Consejos
Nótese que la cantidad de caldo usada en esta receta es muy superior a la que se suele usar para cocer un arroz blanco, hay que tener en cuenta que lo que queremos obtener es un arroz caldoso, por lo que, aunque pueda parecer exagerada, la cantidad de caldo debe ser muy superior a la indicada por el fabricante en el paquete de arroz.
Esta receta se puede elaborar con cualquier tipo de arroz, aunque personalmente me gusta mucho como queda con un arroz de grano redondo.
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