Aunque aun hace calor, el cocido es un guiso que me encanta y hacia meses que no la cocinaba.
En este caso le añadí dos ingredientes poco habituales en él, la calabaza y la alcachofa, es preferible gastar los alimentos perdidos en la nevera que ser purista.
Ingredientes (la olla exprés grande llena, 8-10 personas):
1 preparado para cocido de los de supermercado (carne, pollo, hueso ternera crudo, tocino…)
1 preparado de huesos salados (tocino salado, hueso blanco salado, hueso jamón…)
1 cebolla
2 puñaditos de zanahorias congeladas
2 puñaditos de judías verdes congeladas
2 puñaditos de alcachofas congeladas
1 rodaja gruesa de calabaza
2 patatas grandes
1 bote de garbanzos cocidos
2 chorizos
2 morcillas
Preparación:
Aunque os recomiendo no utilizar esos “preparados de carne”, mejor comprar en nuestra carnicería favorita los ingredientes que deseemos, en este caso utilice estas bandejas, en la cuales, te meten lo que quieren meterte.
En primer lugar pelamos y picamos la cebolla.
Introducimos la cebolla picada, junto con los huesos, tocino y carnes en el interior de la olla exprés.
Cubrimos el contenido con agua.
Tapamos la olla y dejamos a fuego medio, unos 30 minutos, contando a partir de que empiece a salir vapor por la válvula de la olla.
Apagamos y dejamos que vaya perdiendo vapor lentamente, hasta que podamos abrir la olla (en el caso de tener prisa se puede colocar la olla bajo el grifo, abriendo la valvula, para enfriarla con más rapidez, ).
Una vez abierta la olla, colocamos todas las verduras (calabaza a taquitos, las patatas, las zanahorias, las judías y las alcachofas).
En este punto tenemos dos opciones, volver a tapar la olla y contar unos 10-15 minutos desde que salga vapor, o simplemente dejarla destapada e ir controlando (yo utilice la segunda opción, se controla mejor el grado de cocción, aunque enlentece el proceso.
Cuando las verduras están tiernas, se agregan los garbanzos.
Junto con los garbanzos también añadiremos las morcillas y los chorizos cortados a rodajas gruesas.
Dejamos cocer a fuego lento unos cinco minutos más para que se mezclen los sabores.
Seguramente nos sobrara caldo, el cual nos puede servir para preparar una estupenda sopa añadiéndole simplemente un puñado de fideos de los que más rabia nos dé.
Mi forma de servir, es poner un poco de todo en el plato (la sopa la dejo para una cena con algo mas), mojar sopitas en el caldito y acompañar de unas olivitas amargas y unas guindillas verdes a modo de ensalada.
Que aproveche.
NOTA: Con estas medidas con un bote de garbanzos había que buscarlos con lupa en el plato, si queréis mas garbanzos podéis ponerle dos botes, o mejor aun, uno de garbanzos y otro de judías, así es más variado el sabor.