Cuando llega un día de celebración o de fiesta nos parece que el cocido no es lo más idóneo, muchos lo consideran muy corriente y de diario; sin embargo, yo creo todo lo contrario pues utilizando ingredientes de calidad se convierte en el mejor plato gourmet como decimos ahora. Así, elegí esta receta de garbanzos con coliflor para celebrar mi cumpleaños. Después de las Navidades estamos todos deseando coger la cuchara y disfrutar de nuestra cocina casera de siempre. Además, tengo chorizos y morcillas de cebolla valencianas de una calidad extraordinaria, las cuales han aportado sabores espectaculares.
Preparamos la mesa y nos sentamos para disfrutar sin que falte un perejil.
INGREDIENTES
300 g. de garbanzos secos
agua
2 patatas
1 tomate maduro
1/2 coliflor
tocino de jamón
2 chorizos
2 morcillas de cebolla
1 cebolla
1 cabeza de ajos
1 cucharada rasa de pimentón dulce de La Vera
1 cucharadita rasa de cominos en granos
sal
1 hoja de laurel
PREPARACIÓN
Pon en remojo los garbanzos la víspera ( deberán estar en remojo unas 12 horas, aunque dependerá de la calidad del garbanzo ).
Calienta agua abundante en una olla, un litro y medio más o menos, la suficiente para que los garbanzos queden cubiertos. Pon sal y añade los ajos enteros, el tomate troceado, la cebolla partida en cuartos y la hoja de laurel. Cuando comience a hervir incorpora los garbanzos retirando el agua del remojo previamente. Deja que cueza a fuego medio-bajo unas dos horas. Yo los dejé menos tiempo pues eran muy tiernos.
Echa la coliflor troceada en ramitos y las patatas chascadas en trozos grandes. Añade el comino y el pimentón dulce. Es el momento de poner las morcillas y chorizos así como el tocino de jamón. Pincha la piel de los chorizos previamente antes de echarlos.
Cuando la coliflor y patatas estén tiernas, apaga el fuego, saca el tocino, los chorizos y morcillas y ponlos troceados en un plato aparte.
Si el caldo lo prefieres algo más concentrado deja que hierva un poco de más tiempo. Mueve la olla de vez en cuando para que ligue mejor.
NOTAS: Puedes añadir otras verduras y poner zanahorias. También poner más carne como pollo o ternera. Si no tienes tocino de jamón cámbialo por tocino fresco, una punta o hueso de jamón también le viene bien.
Sirve los garbanzos con el chorizo, morcillas y tocino troceado en el mismo plato o aparte en una bandeja o fuente de servir.
De cualquier forma disfrútalo. No te olvides de un trocito de buen pan y buenas aceitunas para acompañar a este magnífico plato de cuchara.
Fuente: este post proviene de Que no te falte un perejil, donde puedes consultar el contenido original.
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