INGREDIENTES:
(Para la masa)
1 huevo
250 g. de harina
1 pizca de sal
250 ml. de agua (más o menos, porque no todas las harinas absorben la misma cantidad de agua)
(Para el relleno)
300 g. de carne picada
1 cebolla
2 o 3 dientes de ajo
1 ramillete de cilantro
1 ramillete de perejil
un poco de pimienta negra
1 pizca de sal
1. Empezaremos con la masa. Batiremos el huevo y añadiremos el resto de ingredientes. Amasaremos hasta que la mezcla sea homogénea y lo dejaremos reposar mientras preparamos el relleno.
2. El relleno también es muy fácil, sólo tenemos que picar todos los ingredientes y mezclarlos bien.
3. Ahora toca estirar la masa, hasta que tenga un grosor de medio centímetro. Ayudándonos con un molde o con un vaso iremos cortando la masa en círculos. ¿De qué tamaño? Depende de lo grande que queramos hacer los khinkali, pero no recomendamos hacerlos más pequeños de 6 o 7 centímetros (además luego los estiraremos más para que sean más grandes y más finos). Lo que haremos con la masa sobrante será amasarla de nuevo y estirarla para sacar más círculos.
4. Ahora toca coger los círculos y estirarlos de nuevo on el rodillo, más o menos hasta que doblen el tamaño de su superficie. Ya están listos para rellenar.
5. Cogeremos la cantidad precisa de relleno que nos permita colocarla en el centro de la masa y envolverla con comodidad. Para eso iremos plegando los bordes de la masa, hasta que nos quede una especie de nudo en la parte de arriba y el khinkali quede totalmente cerrado (si quieres ver bien la técnica le puedes echar un vistazo al vídeo que dejamos al final del post).
6. Los khinkali se cuecen en agua hirviendo durante seis o siete minutos, sin amontonarlos para que no se peguen. Después se sacan, se sirven, se espolvorean con pimienta negra y ya están listos para comer. Puedes echarles alguna salsa si quieres. En el vídeo que dejamos a continuación preparamos una salsa específica para ellos. ¡Buen provecho!