Congelar en casa: Pasadas las Fiestas de Navidad, nos quedan en la nevera y/o en la despensa algunos alimentos que no pensamos consumir de forma inmediata. Asi que, para que no se estropeen y se echen a perder, la solución es congelar. Salvo algunas excepciones, prácticamente se pueden congelar todos los alimentos. Y eso, aparte de no tener que tirarlo, tiene la ventaja de que en un momento dado, nos puede ahorrar tiempo y dinero.
Pero, antes de congelar hay que tener en cuenta 5 reglas de oro:
1.-Antes de congelar los alimentos tienes que bajar al minio la temperatura del congelador.
2.- Controla que en el interior del congelador la capa de hielo no supere el centímetro de grosor para garantizar una temperatura mínima de -18º C (los frigorificos No Frost ya no producen estas capas de hielo)
3.- Congela los alimentos en pequeñas cantidades o repartidos en pequeñas porciones para acortar el procedimiento tanto de congelado como de descongelado, asi como conservar mejor el sabor.
4.- Protege bien el alimento a congelar (mediante bolsas especiales o en tápers, todo ello hermético) e identifica mediante una etiqueta el contenido y la fecha en que lo congelas.
5.-Cuando los alimentos esten cocinados debes dejarlos enfriar antes deponerlos a congelar.
Algunas cosas que SI podemos congelar:
El queso rallado se conserva muy bien en el congelador. También los quesos frescos y los quesos azules suelen quedar muy bien después de descongelarlos. Los huevos aunque no lo creas los puedes congelar. Eso si, ligeramente batidos o separando las yemas de las claras. Si son cocidos, mejor congélalos pelados.
Mejillones, almejas, berberechos: ábrelos al vapor y congela en un recipiente el agua que han desprendido y la carne.
Al congelar líquidos y salsas ten en cuenta que aumentan de volumen al congelarse, así que no llenes más de las tres cuartas partes del recipiente.
Los frutos secos (avellanas, cacahuetes, piñones, nueces, almendras…) no sufren ninguna alteración. Sólo debes sacarlos unos minutos antes de consumirlos. Incluso, congelados están deliciosos y también pueden utilizarlos así para cocinar con ellos (un pastel, un majado, etc).
La fruta, congélala en trozos en un táper, disponiéndolas en capas y agrégale azúcar por encima (300g. de azúcar por cada kg. de fruta).
La fruta más delicada, como melocotones, cerezas, albaricoques, colócala cortada por la mitad en un táper y cúbrela con un almíbar preparado con 750g. de azúcar y 1 litro de agua.
Las frutas del bosque, pueden ser congeladas al natural.
Algunas cosas que mejor NO congelar:
Los quesos de pasta dura no deben congelarse ya que tienden a desmenuzarse.
Los pepinos y las verduras ricas en agua como la lechuga, no hacen buenas migas con el congelador, ya que una vez descongeladas se ablandan.
Tampoco algunas hierbas aromáticas como el cebollino.
Evita introducir en el congelador merengues, flanes, budines, cremas y tartas decoradas con fruta porque pierden consistencia.
¿Cuánto duran en el congelador? Dependiendo de las estrellas del congelador, pueden durar: carnes y aves: hasta 10 meses (por ejemplo, la carne de ternera o buey o el pollo entero), pescados: hasta 6 meses (por ejemplo: crustáceos), verduras: hasta 12 meses (por ejemplo los espárragos, las judías verdes o las habas) frutas, hasta 8 meses, pan hasta 2 meses, quesos tiernos y setas, hasta 6 meses.
Y, para finalizar, un último consejo: no dejes durante mucho tiempo los alimentos en el congelador, ya que pierden tanto sus propiedades nutricionales como su textura y sabor.
Si esta información te ha ayudado en algo y te vendría bien ideas para ayudarte en la cocina, te interesa conocer el SERVICIO DE AYUDANTE DE COCINA ONLINE. Pincha aqui para tener toda la información. También puedes seguir mi trabajo a través de las Redes: Facebook, Twitter, Pinterest, Google+ Youtube e Instagram (si pinchas encima de cada uno de los nombres, irás hasta ellas)