Las hojas frescas y verdes tienen un sabor como a tierra y recuerdan bastante al perejil, la menta y cítricos. Es fácil confundirlo con el perejil, aunque su sabor es diferente.
Usos del cilantro
Se utilizan como ingrediente principal para preparar el guacamole, la salsa verde y el chatni y por supuesto se emplean para preparar sopas, carnes y todo tipo de guisos. Es importante tener en cuenta que las hojas del cilantro no hay que cocinarlas porque pierden todo su sabor y aroma con el calor. Para conservar las hojas (que como siempre estarán en un tarro de vidrio herméticamente cerrado), en el caso del cilantro, lo guardaremos en la nevera y lo consumiremos en pocos días, sino se marchita. No hay que secarlo ni congelarlo.
En muchos países de Sudamérica se llama “culantro” al cilantro y a veces recibe el apodo de “perejil de los chinos”. En cuanto al uso de los frutos del cilantro, decir que se utilizan normalmente secos. Las semillas tienen un aroma cítrico cuando se muelen, recuerdan a la naranja, el cedro y el sándalo. Es ingrediente básico del curry (en la cocina india) y de las salchichas alemanas, el pan de centeno ruso y la cerveza belga. Incluso el café de Medio Oriente lleva semillas de cilantro molidas para darle ese aroma tan especial. El cilantro marida muy bien con el ajo, la albahaca, la menta y el limón.
Beneficios del cilantro
Como beneficios medicinales del cilantro, destacar que tiene propiedades estomacales y estimulantes y ayuda a evitar espasmos intestinales. Además, como tiene propiedades antibactericidas, se utiliza para combatir el mal aliento e incluso para evitar el mal olor del sudor en las axilas (en este caso, usando el extracto de las partes blandas de la planta).
Como el cilantro es una planta de fácil cultivo, podemos tener siempre cilantro fresco a mano, criándolo en una maceta o en el jardín. En verano florecerán unas pequeñas y bonitas flores blancas.
A la hora de sembrar recuerda que solo pueden enterrarse el doble de su tamaño porque si no, no germinan adecuadamente. Se siembran a finales de la primavera y tardan en germinar aproximadamente 3 semanas. Se puede hacer una hilera de semillas y después seleccionar las plantas más desarrolladas para evitar la sobrepoblación y que las plantas acaben compitiendo entre sí. Una vez empiezan a germinar, el cilantro y el perejil no necesitan un riego abundante pero sí unas horas de sol, para que las plantas crezcan más rápido.