-Utilice siempre ingredientes frescos.
-Cuando trabaje con harinas sin gluten, no utilice la opción "pre-timer".
-Al comprar la levadura, compruebe siempre la fecha de caducidad.
-Sea exacto al medir los ingredientes. Las tazas de medida pueden variar, por lo que se recomienda utilizar siempre la misma taza o el mismo estilo de taza para todas las mediciones, sean de ingredientes secos o húmedos.
-Diferentes marcas o moliendas de harina de arroz, pueden necesitar una variación en la cantidad de agua o líquido que lleva una receta.
-Utilice recetas creadas para trabajar expresamente con harinas sin gluten. Cualquier otra receta puede no funcionar simplemente con cambiar una harina de trigo, por otra de maíz o de arroz.
-Todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente. Si guarda la levadura o las harinas en un lugar frío, conviene que la noche anterior a cuando vaya a elaborar el pan, las deje sobre el mostrador de la cocina para que se vayan templando. Los ingredientes líquidos también deberían añadirse templados o calientes.
-Los cambios en el tiempo y en las estaciones pueden afectar al proceso de elaboración del pan. Así, es necesario ajustar los ingredientes de acuerdo con la humedad ambiental. Por ejemplo, en un día húmedo los ingredientes líquidos deberían reducirse en una o dos cucharadas, para evitar que la masa suba mucho y se desborde fuera del envase. También se debería reducir en este caso la levadura.
-Las frutas, nueces y cereales sin gluten se pueden añadir a la mezcla de harina e introducirlos en la máquina junto con los ingredientes secos. No es necesario añadirlos en la forma en que lo indican la mayoría de las recetas normales, porque la masa hecha con harinas sin gluten tiene una consistencia parecida a una masa de pastel, a diferencia de las masas más compactas que se obtienen al elaborar panes con gluten.
-El azúcar se puede añadir junto con los ingredientes secos, en la mayoría de los casos. Los endulzantes líquidos como la miel o la melaza se pueden añadir a los ingredientes húmedos.
-Una cucharadita de vinagre, ayuda a la levadura a funcionar. Cuando se utilizan huevos o sustitutivos de huevo, si se baten, le dan una mejor textura al pan. Una cucharadita de gelatina -sin sabor- añadida a la masa seca, o disuelta en los ingredientes húmedos, mejora la textura del pan.
-La mayoría de las recetas sugieren separar la mezcla de ingredientes húmedos y de ingredientes secos, y luego colocarlos en la máquina según indique el manual: algunos añaden primero la levadura, luego la mezcla seca y luego la húmeda. Otros añaden primero la mezcla húmeda, luego la seca y luego la levadura. Siga las instrucciones de su máquina. Después de añadir los ingredientes, mézclelos bien antes de empezar.
-Si su máquina de hacer pan no tiene una ventanita, no tenga miedo de abrir la tapa para comprobar la consistencia de la masa (deberá tener el mismo aspecto que cuando se hace a mano el pan sin gluten).
-Si la masa crece demasiado y no se rebaja en el segundo amasamiento, trate de golpearla con una varilla para explotar las burbujas. Si se utiliza demasiado líquido en la receta, la masa puede elevarse tanto que se derrame por encima de la máquina. En ese caso golpéela con la varilla para detener su subida y evitar que se derrame.
-Deje siempre enfriarse al pan antes de cortarlo.