Poco a poco voy investigando y adentrándome en este apasionante mundo de las masas que a mí me parece magia. Ver como fermenta la masa, como leva, como con casi los mismos ingredientes pero cambiando tiempos y cantidades, podemos conseguir diferentes panes.
Pero esta vez no quiero limitar esta publicación a la receta, sino que he elaborado un pequeño resumen, después de leer muchos artículos y posts sobre este cereal y su uso en la posterior elaboración de pan, bizcochos, pasta o galletas.
Es un cereal adaptado a climas duros, húmedos y fríos. Desde la Edad Media se cultiva en Asturias, Suiza , Tirol y el sur de Alemania. Es un cereal milenario, origen del trigo actual y alimento de la humanidad desde hace casi 7.000 años. Se tienen datos de su cultivo por los habitantes de Babilionia, egipcios y fue el alimento básico durante siglos de los pobladores del Mediterráneo y Asia.
Algunas personas que son alérgicas al trigo se preguntan si pueden comer alimentos que contienen espelta, pero ésta es tan similar al trigo que no puede ser recomendada para personas con alergia al trigo. Al contener también gluten, de ninguna manera es apta para celiacos
La harina de espelta es una harina altamente recomendable por sus beneficios sobre la salud y por su sabor.
Es una harina floja para la panificación, pero aún sí se puede usar al 100% para hacer pan. No obstante, es muy recomendable para mezclar con harinas de más fuerza y conseguir panes más altos y estructuras más alveoladas.
He leído y visto muchas recetas de pan de espelta, pero me apetecía probar a hacer una propia mía. Así que he ido mezclando y combinando harinas hasta encontrar la que me ha gustado. Además pongo agua muy fría , vale con que esté en el frigorífico, así la masa queda muy floja, cuanto más caliente esté el agua la masa se hace mucho más dura. Sin embargo , por floja que quede la masa no hay que añadir más harina.
Yo creo que es momento de empezar a hacer este pan , delicioso, sano y con una textura incomparable.
INGREDIENTES
350 g. de harina integral de Espelta
150 g. de harina de fuerza
320 g. de agua fría del frigorífico
20 g. de levadura fresca de panadero
10 g. de sal
PREPARACIÓN
Pesa las harinas y mézclalas. Reserva.
Pon en el vaso de la Thermomix la levadura y el agua. Programa 1 minuto, velocidad 1, sin temperatura.
Añade las harinas y la sal. Programa velocidad 6, 5 segundos y después velocidad espiga, 4 minutos.
Saca del vaso y ponla en un bol untado con aceite. Espera a que doble su volumen ( alrededor de 1 hora). Da forma con las manos, haz unos cortes y deja que vuelva a levar.
Introduce en el horno a 180º y espera a que esté dorado.
Deja enfriar sobre una rejilla y ya puedes disfrutar de un pan de lujo.