Seguro que tú también tienes buenos recuerdos de los asados que tu abuela solía hacer, ¿verdad? ¿Recuerdas que tipo de carne utilizaba? Aunque no lo creas, la elección del ingrediente principal, es una decisión delicada ya que, variará dependiendo del plato a cocinar. A continuación, te voy a descubrir las cuatro piezas perfectas para utilizar en el asado.
La pechuga de pavo es un producto un poco seco por lo que, conviene hacerla enrollada y rellena para que esté más tierna. El relleno puede ser de mil cosas: verduras, paté, queso… ¿Cómo te gusta más?
El lomo de cerdo es una carne cilíndrica y aplastada bastante jugosa. Se puede utilizar en, prácticamente, todos los asados y es recomendable para los niños ya que, podrán masticarla muy bien.
El lomo de buey es la parte dorsal, que incluye el solomillo, y que es muy tierna y sabrosa. Quizás tenga un sabor más fuerte que las anteriores así que, cuidado con lo que la combinas.
Por último, la espalda de ternera es una pieza magra especialmente recomendada para hacer carne en salsa. Ponle zanahorias y champiñones y, ¡verás que delicia!
¿Qué tipos de carne utilizas tú?, ¿cómo los cocinas?