Sabes que perder peso normalmente es tan simple como comer alimentos saludables y hacer ejercicio. Sin embargo, siempre cuesta trabajo dejar los hábitos viejos y cumplir con la nueva proposición. Por cada mes te damos un truco y así, al final del año, no sólo habrás logrado practicar los doce, sino que habrás cumplido tu misión. Recuerda que despacio se llega lejos.
1. Vigilar las calorías
No se trata de contar las calorías y obsesionarse con ellas, sino de hacer las porciones más pequeñas para consumir menos de lo que gastas durante el día. Usa un plato de tamaño mediano y no el más grande.
2. Toma agua para quemar la grasa
El agua no sólo es necesaria para mantenerte hidratado, también te ayuda a perder grasa. Para aumentar tus músculos y acelerar tu metabolismo necesitas quemar grasa. Y para quemar grasa tu cuerpo necesita agua. Así de sencillo.
3. Consume 100 calorías menos cada día
Si consumes 100 calorías menos al día de tu dieta, podrás perder 10 kilos al año. Piensa en pequeño y tu ganancia será grande. Cambia las bebidas gaseosas habituales por zumos o refrescos sin gas y escoge una fruta para el postre en vez de dulces. Toma té con limón y deja el azúcar.
4. No dejes de comer
Planea tus comidas para evitar las tentaciones. Si te mueres de hambre durante el día, es muy posible que por la noche te comas hasta la nevera. Controla tu apetito dando de comer a tu cuerpo a lo largo del día. Si son cinco veces en pequeñas cantidades, mejor que mejor.
5. No comas haciendo otras actividades
Concéntrate en lo que comes y no lo hagas simultáneamente mientras ves la televisión, estás leyendo o trabajando con el ordenador. Siéntate a la mesa y tómate tu tiempo... !tu cuerpo se lo merece!
6. Cuelga letreros en tu casa como recordatorios
Pon una nota en la nevera: "cerrado después de la cena, abrirá mañana en el desayuno". Otro en el baño: "cepíllate los dientes en lugar de comer calorías extras".
7. Come al menos tres porciones de fruta y hortalizas al día
Ya sabemos que son alimentos bajos en calorías y muy saludables. Muchas veces los tenemos que desechar porque se quedan en el plato o en la nevera. Tenlos a mano, lavados, cortados y listos para comer.
8. Come antes de ir a las fiestas o a las reuniones
Antes de salir de noche, cómete un huevo hervido, un yogur desnatado, una manzana o dos zanahorias o apios. Diviértete con tus amistades y no con la comida.
9. Busca una actividad física diaria
No tienes que ser una atleta para mantenerte en forma, pero sí planea incorporar cierto ejercicio a tu estilo de vida. Camina por el supermercado entero antes de hacer tus compras, baila en tu casa con o sin tu familia, sube las escaleras, olvídate del ascensor y aparca tu coche más lejos de lo habitual.
10. No termines la comida con un dulce
No es necesario terminar tus alimentos con un flan o un helado. Si necesitas algo dulce, escoge una fruta y deja el postre para de vez en cuando.
11. No te comas las sobras de tus hijos
Si tú eres de los que limpian el plato comiendo lo que dejaron sus hijos por pena, sírveles sólo lo que ellos vayan a comer.
12. En el restaurante
No pidas todo de golpe. Empieza con una entrada y si, después de comerlo ya no tienes hambre, olvídate del plato principal. Las cosas buenas también vienen en tamaño pequeño.
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