Características
El Ahuacatl, el árbol del que procede, se encuentra en México, desde donde se extendió por toda Centroamérica.
El aguacate es de piel rugosa y de color verde oscuro. Tiene una pulpa de textura blanda y mantecosa, de color amarillo o verde claro y una gran semilla en el interior.
Es un fruto de tamaño grande: suele medir entre 12-15 centímetros de largo y suele pesar entre los 150 y los 400 gr.
Propiedades nutricionales
Contiene una proporción de grasas de hasta un 20%. Lo bueno es que la mayor parte de éstas son monoinsaturadas, es decir, que son grasas beneficiosas ya que participan en la eliminación del colesterol y los triglicéridos.
Su valor calórico es de unas 180 kcal por cada 100 gr de producto.
Aporta numerosas vitaminas: A, para la vista y la piel; E, que protege los ácidos grasos; C, antioxidante que ayuda a asimilar el hierro; B9 o ácido fólico, imprescindible para prevenir enfermedades en el feto; y B6, necesaria para metabolizar las proteínas.
Es beneficioso para las personas diabéticas, ya que las grasas monoinsaturadas equilibran los niveles de azúcar en sangre.
Variedades/Tipos
Existen tres tipos generales de aguacate: el mexicano, el guatemalteco y el antillano. A su vez se subdividen en numerosas clases cuya recolección se distribuye a lo largo de todo el año.
Hass: el más popular. Cuando está maduro, su piel adquiere un tono oscuro, casi negro. Está disponible durante todo el año.
Fuerte: desde finales de otoño hasta la primavera podremos degustar este fruto, cuya cáscara, más fina que en otras especies, no se oscurece con la maduración.
Pinkerton: en invierno encontramos este género, de piel más gruesa que los anteriores, pero muy fácil de pelar.
Gwen: desde principios de primavera hasta finales de verano, muy parecido al 'hass', pero con la piel más gruesa.
Reed: el aguacate de verano, con una forma redondeada.
Zutano: quizá el más difícil de pelar, constituye la variedad de otoño.
Consejos de uso en la cocina
Se recolecta antes de madurar, por lo que su desarrollo finalizará ya en el mercado. Cuando al presionar la cáscara notemos que la pulpa cede, están preparados para consumirse.
Es importante no pelarlos ni trocearlos hasta el momento en que vamos a comerlos, ya que se oscurecen y ofrecen un aspecto nada atractivo. Si no nos queda más remedio que dejarlo preparado, una buena opción es añadir un chorrito de limón que evita la oxidación.
La salsa guacamole, tiene este fruto como ingrediente principal. Acompaña a los nachos de maíz como aperitivo, complementa quesadillas y tacos, así como todo tipo de carnes. También podemos incluirla en los sándwiches como alternativa a la mayonesa.
Resulta delicioso en ensaladas, con diferentes tipos de lechuga e incluso con ahumados y mariscos como las gambas.
Curiosidades
Los aztecas llamaban a este fruto 'Mantequilla de los Bosques' por la textura cremosa y suave de la pulpa.
De las variedades más maduras se extrae un aceite muy apreciado en cosmética.
Recetas
Guacamole
Aguacates rellenos
Ensalada de pollo y aguacate
Batido de aguacate y coco
Crema de aguacate y hierbabuena
Aguacate caribeño
Aguacates rellenos de nueces y caviar
Aguacates gratinados
Zumo de zanahoria y aguacate
Salsa para ensaladas (yogur y aguacate)
Fuentes de información: Aproam.com; Avocado.org; Klip7.cl; Salud.com