¡Hola amigos!
Siento no poder publicar esta receta antes, pero es que he tenido muchos exámenes esta semana (y los que me quedan). Tenía pensado publicarla mañana, pero creo que mañana voy a tener menos tiempo que hoy.
Es una receta ideal para estas fechas, ya que es una de las cosas más características en Halloween.
Un merengue crujiente y sabroso.
¿Qué más se puede pedir?
Es muy bonito ver todas las casas decoradas de Halloween con sus telas de araña, fantasmas y, como no, las golosinas. De pequeño iba pidiendo golosinas por las casas de mi pueblo, pero ahora ya no lo puedo hacer. No tengo tiempo ni para mirar la hora. ¿Crees que eso es posible?
Bueno, lo que me compensa a todas estas semanas de tortura es que ya queda menos de 2 meses para la auténtica Navidad. Todo decorado y lleno de dulces y yo, por supuesto, estudiando para sacar este país adelante.
Vamos ya con esta receta que nos está marcando la llegada de la Navidad.
Huesos de merengue
100 g de claras
175 g de azúcar
Un chorrito de limón
Precalienta el horno a 100º.
En un bol, ponemos las claras con el limón y las empezamos a batir a temperatura media-alta. Cuando empiecen a montar (que empiecen a estar espumosas), sigue batiéndolas y agrégales el azúcar en forma de lluvia. Continúa batiendo hasta que el azúcar se haya disuelto por completo. Cuando tengamos un merengue bien firme, lo pasamos a una manga pastelera con boquilla redonda.
A continuación, formamos los huesos. Primero, realiza el palo central. Luego, hazle dos puntos en el final de cada palo. Continúa haciendo lo mismo hasta acabar con todos los huesos. Una vez listos, hornéalos durante una hora u hora y media.
¡Que disfrutes!
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