Falta un mes para llegar a la víspera de todos los santos. Y ya es momento de empezar a pensar en las recetas que prepararemos para dicha fecha.
Indagando por Internet he encontrado esta receta que además de facilísima es muy chula. Se trata de unos fantasmas de merengue que amenizarán vuestra velada el día 31 de octubre.
A los más pequeños de la casa seguramente les encante. Y la verdad, aunque son unos fantasmas de Halloween, no dan miedo alguno, más bien son super majos.
¿Vamos con la receta?
Ingredientes:
Cuatro claras de huevo
240 g de azúcar
Elaboración:
Introducimos las claras de huevo y el azúcar en un recipiente y lo ponemos al baño María.
Con un termómetro para cocina calculamos la temperatura de nuestra mezcla.
Mientras se va calentando la mezcla comenzamos a batir las claras con el azúcar con la ayuda de una batidora. Cuando el termómetro alcance los 50° batimos a toda velocidad. Observareis que en este momento las claras junto con el azúcar son muy brillantes y comienzan a tener una consistencia muy espesa. Retiráis del fuego y seguís batiendo a toda velocidad durante dos o tres minutos.
Ya tenéis vuestro merengue italiano hecho. También lo puedes hacer sin termómetro, para ello loquearemos será tocar la mezcla mientras se va calentando. Con 50° el merengue tiene que estar demasiado caliente para nuestros dedos. Pero prestad atención porque no debe de quemar. Llegados a ese momento retiráis del fuego y seguís batiendo a toda velocidad durante dos o tres minutos y tendréis vuestro merengue italiano hecho sin termómetro.
Ahora con el merengue ya hecho y una manga pastelera con una boquilla redonda, empezamos hacer círculos dando forma a nuestros fantasmas.
Se trata de verter el merengue en forma circular, un círculo sobre otro, hasta conseguir una montaña de círculos acabados en punta que darán la forma en vuestro fantasma.
Una vez realizados todos vuestros fantasmas los introducimos en el horno a 80° durante una hora. Pasada la hora retiramos del horno y cuando estén fríos, con ayuda de chocolate o de un colorante alimentario, hacemos los dos ojitos.
Y nuestra receta de terminada. ¿A que son maravillosos?
Pues espero que la noche de Halloween se os haga la boca chocolate con estos maravillosos fantasmas de Merengue.