La mayor parte de ellos comen prácticamente de todo, aunque las frutas y las verduras siguen siendo de los alimentos más 'complicados'. Además, también tienen sus caprichos y no hay merienda en la que no reclamen chocolate.
Esta lucha entre lo que les gustaría y lo que deberían comer parece que ha llegado a su fin con Chocobó de chocolate con avellanas y Chocobó de chocolate blanco, dos productos lácteos sin ningún tipo de aceite y menos azúcar y grasa que otras cremas de cacao.
Desde Quescrem, una láctea gallega que desarrolla productos con materias primas nobles y de cercanía, nos han retado a preparar algunas recetas sencillas y nutritivas para que los peques disfruten de la merienda y nosotros no nos tengamos que preocupar (o tener remordimientos) por ello. ¡Este ha sido el resultado!
Pero antes realicemos un repaso por las características de estas dos cremas de cacao (Chocobó de chocolate con avellanas y Chocobó de chocolate blanco) y descubramos si, efectivamente, son una buena alternativa:
- Como indicábamos anteriormente, ambos productos están elaborados por una láctea gallega referente del sector por la elaboración de productos con materias primas de calidad, Quescrem. Su ubicación es clave, ya que en Terra Chá, Lugo, hay registradas más vacas que personas, por lo que el acceso a leche fresca es seguro y sencillo. Según nos informan, la mayor parte de los ingredientes que emplean provienen de un radio a 20 km de su planta, lo cual transmite muchísima confianza, la verdad. Además, sabemos que muchos de vosotros vivís fuera de España, venden sus productos en 42 países de los 5 continentes, así que seguramente todos podáis acceder fácilmente a ellos. Esta garantía de calidad está respaldada por la Xunta de Galicia, la cual ha calificado a Quescrem como 1ª empresa láctea de base tecnológica y por el CDTI como NEOTEC. El lanzamiento de su gama Smart Food con productos compuestos por queso crema y quesos frescos deliciosos y saludables pone la guinda al pastel a un proyecto que surgió hace 11 años con la voluntad de desarrollar, diseñar, producir y comercializar productos lácteos con materias primas nobles y mucho I+D+I.
- Por otro lado, no podemos olvidar que los lácteos son uno de los alimentos básicos en la alimentación infantil y el consumo de los mismos debe ser diario. Sí, como todos sabemos, aportan muchísimo calcio, pero no solo eso... La leche y los productos derivados de la misma aportan las proteínas y el fósforo necesarios para la mineralización de los huesos y los dientes. De esta manera, su ingesta potencia el crecimiento óptimo de los niños, pero también asegurará su salud ósea cuando crezcan.
- Otro de los beneficios de los productos lácteos es que normalizan la proporción de grasa corporal y reducen el riesgo de obesidad, sumado a que estas cremas de cacao poseen menos azúcar y grasa que otras, hacen que se conviertan en una opción muy recomendable tanto para el desayuno como para la merienda.
- Por último, nos parece importante resaltar que no contienen ningún tipo de aceite. No es que jueguen con la ausencia de aceite de palma y escondan tras sus ingredientes otro tipo, a priori menos perjudicial, pero igualmente refinado, no... ¡Otro punto a su favor!
¡Prueba superada! Pasemos ahora a ver las meriendas que os proponemos...
Las meriendas que veréis a continuación son tan sencillas de preparar que hemos podido hacerlo en las oficinas de facilisimo.com, sin la comodidad que ofrece una cocina al uso, tan solo complementando Chocobó de chocolate con avellanas y Chocobó de chocolate blanco con otros productos saludables que aportarán el resto de nutrientes que los peques necesitan para afrontar los retos de cada día con la máxima energía y vitalidad.1. Magdalenas integrales y tartaletas con crema de cacao, frambuesas, frutos secos y semillas
La combinación del sabor de las magdalenas integrales con el resto de ingredientes les conquistará. Por supuesto, lo mismo ocurrirá con las tartaletas. Lo ideal de estas dos opciones es que son tan fáciles de preparar que ellos mismos podrán colaborar y jugar con las diferentes texturas y tonalidades en función de sus gustos.
2. Vasito de crema de cacao, avena y frambuesas (se puede añadir yogur)
Esta receta no solo es fácil de elaborar, sino que también de comer. La mezcla de sabores es perfecta y el toque crujiente de la avena un acierto total.
3. Pinchos y bowl de frutas
La mejor solución para que nuestros hijos no solo coman fruta, sino que además les encante, es ofrecérsela de manera creativa... y en conjunto con estas cremas de cacao. Nuestras propuestas son unos pinchos o piruletas de frambuesas, fresas y moras para mojar al estilo fondue o un bowl al que también añadiremos manzana.
Gracias al reto que nos propusieron desde Quescrem pasamos un rato de lo más divertido ideando diferentes combinaciones y, tal y como podéis ver a continuación, nosotros, los padres, también pudimos poner a prueba el sabor de Chocobó de chocolate con avellanas y Chocobó de chocolate blanco. Dicen que una imagen vale más que mil palabras, así que os podéis imaginar hacia dónde irían enfocadas las nuestras, ¿verdad :p?
Esperamos que estas recetas os inspiren a la hora de preparar las meriendas de vuestros hijos y, de la misma forma, os ayuden a que coman mejor. ¡Nos vemos en el próximo post!