Montar claras a punto de nieve siempre ha sido uno de los retos de la repostería. Generalmente, la técnica para montar claras a punto de nieve parece muy sencilla: separar las yemas de las claras, batiendo las últimas hasta conseguir una textura como la de la imagen a ccontinuación:
Así dicho, parece fácil, pero en algunos casos, por mucho batir no conseguimos llegar a obtener la textura deseada. ¿Qué es lo que falla? ¿Qué ha podido salir mal? En realidad son muchos factores los que pueden influir en que las claras se nieguen a coger el punto de nieve. Si es tu caso y por más que lo intentas parece que las claras se revelan contra ti, te dejamos un montón de trucos y consejos clave que harán que seguro que te suban siempre a la primera.
En este vídeo, por ejemplo, te dan nada más y nada menos que 5 consejos. Uno muy importante es la temperatura a la que debe estar el huevo. ¿Sabes cuál es? La mejor, a temperatura ambiente. No te pierdas las otras 4 claves que harán que por fin monten las claras.
Hace un tiempo, también nuestra amiga autora del blog Lindanita compartió con nosotros un artículo relacionado con esta técnica del montado de claras. Pero en este caso se centra en conseguir que este proceso sea lo más rápido posible. Es cierto que si se hace de forma manual, es algo tedioso y sobre todo cansado, así que lo primero que te recomendamos es que uses una batidora. Pero aún así, puedes tardar unos minutos que puedes reducir con las claves de este post. Por ejemplo, en este proceso rápido mantener las claras frías es muy importante.
Venga, y para terminar, otro truco más de regalo, muy muy sencillo, que también te ayuda a que espumen las claras muy bien. Tan sólo necesitas un poco de azúcar glas.
¡Ah! Y una vez que tienes las claras montadas, úsalas para hacer bizcochos más esponjosos o unos deliciosos merengues.
No dudes en dejarnos también tu truco en el muro de nuestro canal de Facebook.
Imágenes: primera, Wilson Hui/Flickr.com; meahtsingan/Flickr.com y Calgary Reviews/Flickr.com.